A pesar del fracaso de la escandalosa sesión de ayer por falta de quórum y de la brutal represión en las afueras del Congreso, el Gobierno vuelve a la carga con la idea de convocar para el próximo lunes a una nueva sesión con la idea de tratar la reforma de la ley previsional.
Desde Cambiemos anticiparon que este mediodía se haría un llamamiento “a una mesa de diálogo con los gobernadores del PJ y sus diputados, para que ratifiquen su apoyo a la reforma, como ya lo hicieron en el Senado y al suscribir el Consenso Fiscal”.
Al mismo tiempo, no se descarta que a pedido del bloque oficialista el Gobierno instrumente – a través de un decreto o de una decisión administrativa-, una compensación monetaria por el cambio de la fórmula de actualización de los haberes jubilatorios.
Esta modificación -que iba a empezar a aplicarse en marzo de 2018- es el principal motivo de rechazo al proyecto del Gobierno, ya que significará una reducción en los haberes que perciben jubilados, pensionados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Por eso, en la Casa Rosada confían en que el anuncio de una compensación y el refuerzo de los acuerdos con los gobernadores del PJ podrían ayudar a descomprimir la situación, algo en lo que no coinciden desde la oposición, teniendo en cuenta que la premisa es que el Gobierno retire directamente el proyecto.
Al mismo tiempo, desde el Gobierno se analiza por estas horas la delicada situación en la que quedó posicionado el oficialismo después de lo que ocurrió ayer: una brutal represión de las fuerzas de seguridad, con 22 detenidos y hasta con diputados reprimidos, y el creciente descontento social por los alcances de la reforma previsional.