En la segunda reunión paritaria, el gobierno de María Eugenia Vidal mantuvo la oferta de suba del 15% anual en tres cuotas y propuso pagar un bono de 6 mil pesos a quienes no falten en todo 2018, de 4500 pesos para quienes tengan 4 faltan y de 3 mil para los que tengan 8 faltas. La propuesta fue rechazada de plano por el Frente de Unidad Docente desde donde reclaman una suba del 20% que, además, contenga cláusula gatillo atada a la inflación.
Durante el encuentro, que se desarrolló en La Plata, el ministro de Economía, Hernán Lacunza, y sus pares de Trabajo, Marcelo Villegas, y de Educación, Gabriel Sánchez Zinny, reiteraron la oferta que habían hecho hace una semana y que consiste en una suba del 15% a pagar en tres cuotas -enero, mayo y septiembre- sin cláusula gatillo. Esa propuesta eleva el salario inicial para el maestro de grado de 12.500 pesos actuales a 14.375 pesos en octubre y volvió a ser rechazada por el Frente de Unidad Docente, que integran SUTEBA, FEB, AMET, UDA, SADOP y UDOCBA.
El ítem nuevo en la propuesta que presentaron a los gremios fue el bono por presentismo para 2018. El plus o “reconocimiento extraordinario anual” será de 6 mil pesos para aquellos docentes que vayan todos los días a clase. No obstante, el gobierno fijó algunas excepciones que no afectarán el cobro como las licencias por maternidad, donación de órganos, desempeño por mayor jerarquía, vacaciones, profilaxis, ART, citación de autoridad competente, duelo, estudio y violencia de género.
También se pagará un proporcional a quienes no hayan tenido asistencia perfecta: los que falten hasta 4 días anuales por motivos no contemplados, van a cobrar el 75% del monto total, es decir 4500 pesos y los que falten hasta 8 días por motivos no contemplados, van a cobrar el 50% del monto, es decir 3 mil pesos.
En la mesa técnica el gobierno también informó que el próximo 2 de marzo pagará el “premio” de 4.500 pesos que la Gobernadora decidió otorgar por decreto a los maestros que no pararon ni faltaron a lo largo del año pasado.
Al término de la reunión que se extendió por dos horas, los gremios manifestaron su total desacuerdo con el plus por presentismo pero no hablaron aún de medidas de fuerza en el arranque de las clases, previsto para el 5 de marzo y anticiparon que el gobierno se comprometió a convocarlos nuevamente la semana que viene.
El secretario general de SUTEBA, Roberto Baradel, consideró que el plus por presentismo es “perverso” e implica “una práctica desleal y antisindical” de parte del gobierno. “El plus, anualizado, son 500 pesos por mes que será descontado a un docente que tiene cáncer, HIV o es diabético. Es una oferta perversa porque se está castigando a los docentes que tienen una enfermedad o que tienen que cuidar a su hijo enfermo”, dijo e insistió con que “la provincia está en condiciones de hacer una oferta para que los docentes recuperen poder adquisitivo”.
En la misma línea, la presidenta de la FEB, Mirta Petrocini, explicó que la oferta fue rechazada porque “hay una urgencia de tratar el incremento salarial, la suba que ofrecen lleva el salario mínimo a 14.300 pesos y no llega a cubrir ni la canasta básica”. Y volvió a reclamar la cláusula gatillo: “Si el gobierno está tan convencido de que la pauta inflacionaria es inalterable, ¿qué temor tiene de aplicar la cláusula gatillo?”.
También rechazó el plus de 6 mil pesos: “No vamos a negociar la salud de nuestros docentes por una cifra perversa, discrecional y que es una práctica desleal. Es inaceptable que se premie la salud docente o que un docente vaya a trabajar enfermo”. Aclaró, no obstante, que los gremios quieren discutir el ausentismo pero que hoy “no tienen elementos”.