Envalentonados por haberle arrebatado ocho intendencias al peronismo en las elecciones de 2015, en Cambiemos no ven la hora de cumplir con una de las obsesiones de Mauricio Macri: arrasar en los comicios del año próximo, para que prácticamente no queden rastros del movimiento fundado por Juan Domingo Perón.
Por eso mismo, y con la mirada puesta en 2019, las principales espadas del oficialismo trabajan para lograr ese objetivo, que tiene al conurbano bonaerense como centro de ese objetivo. De ahí que la herramienta a la que recurrirá el Gobierno –tanto a nivel nacional como provincial- es la obra pública, con una inversión que rondará los 8 mil millones de dólares.
Los territorios más codiciados para poner en práctica ese plan son los distritos de la Primera y Tercera sección electoral, es decir, allí donde se concentran los más altos porcentajes de fidelidad al peronismo kirchnerista.
La estrategia apunta justamente a avasallar con obras públicas a los habitantes en esos distritos, con el objetivo de mostrarles que “la única salida” será votar al oficialismo. Y, claro, para sostener esa estrategia, se producirá esa multimillonaria transferencia de recursos, que a través de créditos y subsidios, literalmente inundarán a los municipios en los que Cambiemos quiere y necesita hacer pie.
La idea es hacer un trabajo quirúrgico, con “anuncios más focalizados para cada barrio”. “Tenemos que lograr penetrar en ese elector, demostrarle que hay una solución, que hay una salida”, dicen desde Cambiemos.
Más allá de la factibilidad de captar a esos votantes, el plan esconde un objetivo adicional: mantener a los intendentes K ocupados. “Si nosotros vamos a los circuitos electorales que les fueron favorables, ellos no se van a poder descuidar y no van a poder ampliar su base”, pronostican en el oficialismo.
De todas maneras, en los despachos oficiales saben que la tarea no será sencilla, teniendo en cuenta que por ahora no encuentran la respuesta para hacer frente al impacto negativo que, sobre todo en los sectores socialmente más desprotegidos en el corazón histórico del poder del PJ, generan la inflación y los brutales tarifazos.