Después de que Mauricio Macri hizo un llamado ayer para que las Fuerzas Armadas brinden “apoyo logístico a las fuerzas de seguridad para cuidar a los argentinos”, el Gobierno confirmó en las últimas horas que se están analizando cambios en la legislación para que las FF.AA. puedan actuar en temas de seguridad interior y, como no podía ser de otra manera, criticó al kirchnerismo por su oposición.
Así lo hizo saber hoy el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, quien explicó que existe en la actualidad un “corset” para la actuación de las Fuerzas Armadas a raíz del decreto que firmó el entonces presidente Néstor Kirchner en 2006, y que establece que queda “expresamente prohibido” la intervención de los uniformados en seguridad interior.
“Ese corset que puso en su momento en el decreto el gobierno anterior, restringe la capacidad de acción de las Fuerzas Armadas en formas que podrían ser útiles para la seguridad argentina, además de conservar su mandato”, sostuvo Burzaco en declaraciones a radio Mitre.
El número dos del ministerio de Seguridad analizó que la reglamentación actual de la Ley de Defensa “dice que el Ejército sólo podía actuar ante agresiones o amenazas externas de una fuerza armada extranjera, algo que hoy en el mundo muy rara vez existe”.
De todas formas, aclaró que los cambios están “en revisión”, y que “la seguridad interior tiene una restricción legal que no se va a sobrepasar”.
Agregó que “el presidente dio un mandato de usar la logística del Ejército para colaborar con la seguridad de los ciudadanos. Para nosotros es muy importante. Por ejemplo, tenemos móviles de Gendarmería que se desplazan miles de kilómetros en el país cada vez que hay un conflicto grave. Esta semana fueron 300 a Rosario. Si podemos usar los Hércules del Ejército o helicópteros el tiempo es mucho menor, más rápido y seguro”.
Ayer, durante el acto por el Día del Ejército, Macri justificó su postura en que “estamos viviendo épocas de grandes transformaciones, el mundo está en constante movimiento y tenemos desafíos cada vez más importantes”, y destacó que “necesitamos Fuerzas Armadas que se adapten a las amenazas del siglo XXI, y que estén preparadas para enfrentar los problemas que nos preocupan”.
El decreto 727 de la ex ministra de Defensa, Nilda Garré, que fue firmado por el entonces presidente Néstor Kirchner en 2006, promulgó lo establecido en la Ley de Seguridad Interior y de esta manera anuló la posibilidad de que militares puedan tener incidencia en asuntos internos, que abarcan desde patrullajes en zonas fronterizas hasta su poder represivo ante conflictos sociales.