La gobernadora María Eugenia Vidal, antes de su viaje al Vaticano para encontrarse con el Papa Francisco, se reunió con el presidente Mauricio Macri para informarle que no quiere ir por la reelección en la gobernación de la provincia de Buenos Aires, abriendo el camino para que el presidente la incorpore como candidata a vicepresidenta en su fórmula para el año próximo.
El escritor Jorge Asís lo adelantó hace algunas horas y de allí que ya empezaron a medir quien puede reemplazarla en la candidatura del próximo año. Desde este portal ya adelantamos que el gobierno esta midiendo al presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, el intendente de Vicente López y primo del presidente, Jorge Macri, el senador Esteban Bullrich, el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo y al mismísimo Marcos Peña.
Vidal sabe que la situación económica es muy difícil de revertir luego del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), especialmente en el Gran Buenos Aires. Se recortará la obra pública en 70.000 millones de pesos, el dólar seguirá subiendo, la nafta seguirá aumento mes a mes y las tarifas no se detendrán. Se espera inflación muy alta en mayo del 2,2% y en junio de 3.5%. Ni hablar de los alimentos que no detienen la remarcación.
A la difícil situación económica, la gobernadora junto a Horacio Rodríguez Larreta se pusieron la camiseta para cerrar filas con Macri, olvidándose del desastre de los CEOs. “Hay que tender puentes con el peronismo por que se viene grandes recortes en las provincias”, dicen en el entorno de Vidal que sabe que próximamente se tendrá que hacer cargo de AYSA y las eléctricas Edenor y Edesur. De allí que en las últimas horas negoció con el sector de Martín Insaurralde y de Massa para modificar la ley original sobre tarifas cediendo en su propuesta en la Legislatura provincial.
El sueño de Vidal de reemplazar a Macri en 2019 ya sabe que terminó. El presidente fue claro e ira por la reelección aunque pierda las elecciones. No presentarle como le sugirió Hector Magnetto en la residencia de Olivos sería asumir una derrota, aunque la candidata fuera de su mismo partido.
Por ahora, el presidente no definió quien lo acompañará en la fórmula. En un principio Carolina Stanley está en carrera, pero si la situación no mejora será la misma Vidal.
Por ahora no lo van a decir, pero María Eugenia Vidal ya le dijo a Macri que no quiere ser candidata a la reelección de Buenos Aires. Ya se lo mide a Monzó, a Jorge Macri, Estéban Bullrich y a Ritondo.https://t.co/sq4XGfw1NX
— Jorge Asis (@AsisOberdan) 8 de junio de 2018