El lapidario informe que anoche brindó Jorge Lanata sobre Astillero Río Santiago, generó un generalizado repudio desde distintos ámbitos, debido al burdo acompañamiento entre los datos y los testimonios que se mostraban, con el ajuste que lleva adelante el Gobierno y que, a la luz de lo que está ocurriendo, apunta hacia la privatización de esa empresa estatal ubicada en Ensenada.
En su programa “Periodismo para Todos”, el comunicador ultraoficialista apuntó contra el sindicalismo, al adjudicarle “enriquecimiento a costa de los bonaerenses”, y justificó que la empresa no puede seguir en funcionamiento “si no se hacen barcos desde hace 30 años”. Como no podría ser de otra manera, las principales fuentes consultadas para el informe fueron funcionarios y legisladores del propio macrismo.
El informe fue, a todas luces, una clara maniobra de desprestigio hacia la empresa, en un escenario de plena denuncia de vaciamiento financiero impulsado desde la gestión de Mauricio Macri. Entre otras definiciones, Lanata caracterizó al ARS como “una caja negra sindical” que “le cuesta al Estado $ 3.600 millones por año”.
En las últimas horas, el intendente de Ensenada, Mario Secco, remarcó la connivencia entre la crisis laboral del Astillero, el marco de ajuste del Gobierno y la vuelta al Fondo Monetario Internacional. “Ya no solo el FMI le indica al Gobierno dónde tiene que ajustar, ahora los medios hegemónicos se sacaron la careta y públicamente le sugieren a Cambiemos qué fábricas tiene que cerrar y cuántos trabajadores debe echar. ¡Esto es una locura!”, aseguró el jefe comunal.
En tanto, el referente del gremio ATE dentro del Astillero, Francisco Banegas, señaló: “Decir que el Astillero es ‘improductivo’ no corresponde a una responsabilidad de los trabajadores sino del mismo Gobierno. Es como decir que si una empresa no funciona es responsabilidad del empleado y no del patrón y dueño de la empresa. Está claro que falta inversión, no sobra trabajo sino que falta”. Banegas fue entrevistado para el informe de PPT en nombre del sector gremial, que fue señalado como “mafioso” y “violento”.
Además, aseguró que el Astillero le habría ahorrado al Estado “más de 200 millones de dólares” si el Gobierno “no hubiera comprado flota naval a Israel y Francia”.
En esa misma línea, el gremialista Jorge Smith sostuvo que “todo cierra que quieren destruir la industria naval. Nosotros denunciamos el acuerdo fraudulento de comprar lanchas a Francia en donde nosotros podíamos hacer veinte lanchas con el valor de las cuatro que compraron”.
Por su parte, la titular del bloque de diputados provinciales de Unidad Ciudadana, Florencia Saintout, remarcó que “Alemania compró 5 buques al Astillero Río Santiago. Ahora Mauricio Macri y María Eugenia Vidal quitan arancel para la importación de barcos, fundiendo la industria naval y comprando naves a Francia. Lanata dice que hace 30 años no construye un barco, miente”, expresó la legisladora, quien definió que “para el macrismo y sus periodistas militantes, un trabajador con derechos es un gasto y una empresa estatal reconocida internacionalmente es un aguantadero”.