El enfrentamiento entre ambos estaba latente. Era obvio que en algún momento el choque se iba a producir. Y ese momento llegó anoche: el duelo entre Cristina Kirchner y Miguel Ángel Pichetto fue, sin lugar a dudas, la gran pulseada política que dejó en el Senado el tratamiento de los pedidos de desafuero de la ex presidente.
Durante su discurso, la senadora aludió al “fuego amigo. “Si me partiera un rayo, algunos igual no llegarían nunca a presidente por el voto popular. Parece que a algunos se les quemaron los papeles y entonces la caballería judicial arremete con fuerza”, ironizó la ex presidenta, haciendo clara referencia a Pichetto.
En tanto, CFK sostuvo que “estas cosas (por los pedidos de desafuero y los avances judiciales) no le pasan a cualquiera. Si los cualquiera votan lo que quiere el poder de turno, levantan la manito para votar reforma previsional, no les pasa”, en obvia alusión al bloque del Peronismo Federal que preside el rionegrino.
“Estas persecuciones les pasan a los que creemos en algo y defendemos ese algo”, agregó. “Y yo creo en la redistribución del ingreso, en el empoderamiento de los derechos, en las universidades públicas y en el desendeudamiento”. Y dirigiéndose al rionegrino, quien fuera su jefe de bloque, agregó: “Pichetto hablaba de deterioro de la política. Se olvidó un detalle, que el que puede ser presidente en Brasil se llama Ignacio Lula Da Silva y no puede ser porque lo metieron preso. ¿Le suena senador?”, desafió.
Después del discurso de Cristina, el senador no dejó pasar por alto esa estocada, y le contestó diciendo: “Quédese tranquila, que usted va a poder ser candidata en 2019”.
Mientras, subrayó que “sería conveniente que cuando me toque hablar a mí la senadora se quede. Cuando hablé del caso brasileño hablé de Lula también. Así que recomiendo que nos escuchemos”.
El legislador rionegrino también consideró que “siempre hemos tenido una actitud de respeto, en lo personal y humano y a su investidura. Nunca hemos llamado traidores a nadie ni lastimado a nadie en lo personal”.
Aclaró Pichetto que “no hay ningún esquema de conspiración del peronismo. Toda esa pavada, esa estupidez conspirativa, no tiene ninguna dimensión”. Y agregó: “Creer que esto es una conspiración interna de sectores que quieren evitar que sea electa, es poco serio…”.