En un clima de indisimulable tensión y con el bloque del Peronismo Federal fracturado, Cambiemos confía en convertir hoy en ley en el Senado el Presupuesto 2019, gracias al apoyo de una parte del PJ y de algunos representantes de fuerzas provinciales.
Mientras, en los alrededores del edificio del Congreso se montó un gigantesco operativo de seguridad, con la presencia de efectivos de Policía de la Ciudad, Federal y la Gendarmería, ya que diversas organizaciones sociales, políticas y sindicales convocaron a concentrarse en los alrededores del lugar, para exteriorizar su rechazo al proyecto.
Está claro que el Gobierno necesita de manera imprescindible la sanción de la ley como parte de su acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y días antes de la cumbre del G20, teniendo en cuenta que el país estará bajo la lupa de las naciones más poderosas del planeta.
En tanto, y a pesar del terremoto interno que se viene dando en la bancada que conduce el rionegrino Miguel Ángel Pichetto -de donde se espera que salgan los votos clave-, en Cambiemos están confiados en que conseguirán el número necesario de senadores que permitan convertir en ley el Presupuesto.
El oficialismo saca cuentas, y por ahora sabe que a los 25 legisladores propios, sumaría al menos una decena de la bancada del peronismo, y a los representantes de varios bloques provinciales, entre ellos los aliados Carlos Reutemann y Juan Carlos Romero.
Para asegurar la mayoría se necesitan 37 votos (si asisten todos los senadores) y en Cambiemos destacan que ya se garantizan un piso de 40, aunque trabajaban para aumentar ese número, teniendo en cuenta que en las últimas horas ya habrían exteriorizado su posible apoyo los tres santiagueños que responden al gobernador Gerardo Zamora, y los dos senadores del PJ fueguino.
“Hay votos que se van a resolver hoy mismo, antes de que empiece la sesión, si el Gobierno les cumple los acuerdos”, confió un senador tras salir de una reunión de bloque en las oficinas de Pichetto. Después del abandono de los tucumanos José Alperovich y Beatriz Mirkin, para aliarse a la bancada que lidera Cristina Kirchner, la posibilidad de que continúe la fuga quedó suspendida hasta que se resuelva el número para quedarse con los dos lugares por la mayoría en el Consejo de la Magistratura.