“Los que vienen de la barbarie hoy son los bolitas, los paraguayos, los paraguas, los cabecitas negras… Siempre ese alejarnos de la realidad de un pueblo, calificándolo y poniendo distancia. Esa es la experiencia de mi país”, dijo hoy el Papa Francisco al referirse críticamente a la Argentina, “donde la mayoría de los pueblos originarios fue aniquilada bajo el lema de civilización y barbarie”, mientras lamentó que hoy sigue existiendo en su patria este “desprecio de los pueblos”.
Las duras palabras del jefe de la Iglesia católica fueron dichas al dejar inaugurado en el Vaticano el sínodo sobre la Amazonia, un evento eclesial que se extenderá a lo largo de tres semanas. Y lo hizo ante los 185 padres sinodales -cardenales, obispos y religiosos de todos los continentes-, auditores, expertos e invitados especiales, entre los cuales 16 son indígenas del Amazonas-.
Fue en este contexto que el ex arzobispo de Buenos Aires, que solía frecuentar las villas, evocó la historia argentina: “En nuestro país un lema, civilización y barbarie, sirvió para dividir, para aniquilar. Y hacia fines de los años 80 llegó al culmen de aniquilar a la mayoría de los pueblos originarias, porque eran barbarie. Y la civilización venía de otro lado. Es el desprecio de los pueblos”, denunció.
Para que no quedaran dudas, agregó: “Y voy a mi experiencia en mi tierra y esa civilización y barbarie que sirvió para aniquilar al pueblo, todavía sigue en mi patria. Con palabras ofensivas, entonces se habla de civilización de segundo grado, los que vienen de la barbarie y hoy son los bolitas, los paraguayos, los paraguas, los cabecitas negras… Siempre ese alejarnos de la realidad de un pueblo, calificándolo y poniendo distancia. Esa es la experiencia de mi país. Y después el desprecio”, indicó.
4 Comentarios
La mención de los “cabecitas negras” hace referencia a uno de los principales logros del primer peronismo. No solo dio una buena vida a todos en general sino que dio dignidad humana a esa argentina mestiza hasta entonces despreciada por los “nuestros”, los blanquitos de origen europeo.
En ese sentido la Argentina cambió para siempre, por más que siga habiendo energúmenos residuales que hablan de los “negros de mierda”.
¡Pichetto! ¡teléfonooooo!!!!!
Hemos vivido 130 años con barreras y camionéd por el bajo
Justo ahora que estamos endeudados hasta las berijas y sin lsburo y con los chicos muertos de hambre, se les ocurre hacer el paseo ďel bajo, la elevacuon de kis ffcc san martín y mitŕe. Cada 30 mts de cada uno de esas obràs equivale a una escuela con járdín guarderia y comedor,Tiene razón el Dr. No son obras para este momento. Hay que pensar con el estómago del 0tro y no con la urna propia
El Papa Francisco sigue sorprendiendonos con su compromiso con los mas humildes.