El candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, cuestionó con duros términos las declaraciones de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, respecto de la elección del domingo, que planteó como una cruzada para decidir si el país “vive en democracia o no”.
Para Fernández, se trató de “una indecencia” de parte de la Gobernadora. “Son muy indecentes, porque nadie afectó tanto la convivencia democrática como ellos. La afectaron con este discurso de ellos y nosotros, que Macri repitió varias veces el otro dia”.
En declaraciones con la Cielo, Fernández también cruzó a Macri: “Dijo que él no era como nosotros, lo decía como con una percepción de asco. A la segunda vez que lo dijo, le respondí que estoy feliz de no ser como él: ‘Yo no soy como usted, no quiero ser como usted’”.
Fernández no se quedó en esa crítica, sino que abundó respecto de la “decencia” del Presidente de la Nación: “Viene de una familia que no es sinónimo de decencia. Se enoja por lo que dije del padre, cuando fue él el que dijo que su padre había cometido delitos, dos semanas después de su muerte”, recordó. Eso, remató, “habla de la calidad humana de quien lo dice”.
En ese sentido, no omitió señalar que Macri también “nombró jueces por decreto en la Corte (por la Corte Suprema de la Nación)”. “¿Esos son los democráticos y los republicanos?”, se preguntó, con ironía, y siguió: “echaron un procurador porque estaba advirtiendo lo que pasabando en el Correo Argentino, no le pagaron a la Argentina el canon que correspondía, mientras su hermano tenia 600 millones de pesos en las guaridas del exterior”.
Por último, reflexionó sobre el blanqueo, que permitió que parientes del Presidente blanquearan sumas millonarias que tenían depositadas en paraísos fiscales. “Nadie tiene escondido lo que puede mostrar. Uno esconde lo que no puede mostrar, porque algo de irregular tiene. Esa es plata que le robaron al estado o plata que obtuvieron ilegalmente”, remató.