Con esta iniciativa, se busca que la producción pública de medicamentos tenga un incentivo fuerte, como ocurrió en Brasil que permitió el acceso de una gran cantidad de población a medicamentos de primera necesidad que los laboratorios privados no estaban interesados en producir. Se trata, principalmente de abastecer a la sociedad de aquellos medicamentos que a los laboratorios no le son rentables, y no son producidos por ellos, como así también para que tenga una incidencia en la venta de medicamentos a un precio menor, y ayude a fijar precios no especulativos.
Por otra parte, el diputado Pablo Garate expresó: “La importancia de la producción pública de medicamentos radica en que estos laboratorios no tendrán ánimo de lucro. Por eso, pueden producir a menor costo y hacerse cargo de medicamentos que las empresas privadas ya no fabrican porque no les son rentables, los denominados “medicamentos huérfanos”, como por ejemplo drogas para tuberculosis. Otro de los objetivos es poder cubrir licitaciones públicas que generalmente quedan sin oferentes debido al desinterés por parte de los laboratorios privados. Como así también producir medicamentos y productos en casos extremos, como lo es en la actualidad con el Covid-19, a raíz del faltante o de la especulación de precios que hay con el alcohol en gel, el estado podría producirlo y entregarlo para contribuir a la prevención”.
“Venimos trabajando desde hace meses en este proyecto, lamentablemente las circunstancias actuales no hacen posible poder analizar con detenimiento esta propuesta, pero estoy convencido de que una vez que atravesemos esta circunstancia extrema, esta iniciativa le va a permitir a la Provincia incrementar fuertemente la producción pública de medicamentos que van a estar al servicio de los bonaerenses y de todos los argentinos”, explicó Pablo Garate.
El ejemplo mas moderno de creación de “laboratorio público” se trata del “Laboratorio del Fin del Mundo”, el cual fue creado en el año 2015, dependiente del gobierno de Tierra del Fuego, el cual en el año 2019 logró firmar un convenio de confidencialidad y de cooperación que deja abierta la puerta para la fabricación conjunta de medicamentos, con el Laboratorio Farmacéutico Federal Farmanguinhos de Brasil.
“Considerando que el desarrollo y la adopción de una política de medicamentos son partes esenciales de una política de salud y son elementos fundamentales para la implementación efectiva de acciones capaces de promover una mejora en las condiciones de atención a la salud de la población, resulta determinante tomar acciones directas, estructurales, que tiendan a ofrecer soluciones sustentables temporal y políticamente”, finalizó el tresarroyense Pablo Garate.