Lilita Carrió y otros políticos asistían a la clínica de estética de Rubén Mühlberger, detenido ayer por diversas irregularidades por orden la Fiscalía nº a cargo de la doctora Valeria Massaglia.
A raíz de una inspección realizada por personal del Ministerio de Salud de la Nación y efectivos de la División Delitos contra la Salud de la Policía de la Ciudad en la clínica, ubicada en el barrio de Retiro, se detectaron numerosas faltas como medicamentos vencidos y residuos patológicos que no respetaban el protocolo de tratamiento de los mismo. Además, el lugar no contaba con la habilitación correspondiente para funcionar, pese a lo cual se encontraba atendiendo pacientes.
Sus propuestas y conceptos eran polémicos, como quedó demostrado antes de la pandemia luego de que el médico hablara de una supuesta “cura para el coronavirus” en el programa de Moria Casán -una de sus pacientes famosas-, días antes de que el ciclo saliera de la pantalla de América. Mühlberger se hizo famoso en los medios ofreciendo la llamada medicina “ortomolecular”, una práctica que encontró muchos adherentes en las figuras del espectáculo.
Más allá de los famosos, algunos políticos también asistía como Martín Redrado. La más famosa era la dirigente de Juntos para el Cambio, Elisa Carrió, que recibía un trato especial. Según Jorge Rial, la ex diputada llevó a un juez federal.