Mientras los anticuarentena, los porteños llenos de odio, los que queman barbijos y gritan consignas en contra del gobierno de Alberto Fernández van al Obelisco, los argentinos de bien pueden pasar por la casa del Tata Cedrón en Villa del Parque y escucharlo cantar.
Desde hace unas semanas, el gran artista argentino, decidió sentarse en la puerta de su casa y cantar. “Si no canto me muero, se me atrofia el alma”, dice y se le ocurrió en plena pandemia cantar para una persona o para 20 o 50 vecinos que quieran acercarse.
Para que no haya un gran amontonamiento en la vereda y mantener el distanciamiento social, lo único que se recomienda es escribir un mail de su compañera Antonia ( antoniagarciacastro@gmail.com ), quien avisará día y hora. El formato del show es de 20 minutos aproximadamente.
Según su mujer, el Tata, peronista de toda la vida, amigo de Julio Cortázar en su exilio en París, espera que el presidente Alberto Fernández pida un turno para escucharlo.