La militancia está decidida a salir a la calle a defender el gobierno de Alberto y Cristina frente al avance del establishment económico, político, mediático y judicial decidido desgastar la gestión y en lo posible derrocarlo y poner al presidente de la Corte Suprema en la Casa Rosada.
El presidente sabe que el peronismo en la calle es imparable y estaba preocupado por lo que sucedería el próximo 17 de octubre cuando se festejen los 75 años de un hecho que cambio la historia del país para siempre. Le preocupaba que más allá del pedido presidencial de quedarse en las casas, la gente saliera igual al acto de la CGT con los riesgos de contagio por el coronavirus.
Fernández consulto dentro de su gabinete que opciones había y finalmente Javier Grosman, el organizador de los eventos y los festejos del Bicentenario trajo la respuesta adecuada. “Podemos organizar un mapa digital, sin límites de asistencia, por lo cual los militantes en todo el país podrán recibir el acto por streaming, y sumar un avatar para interactuar con otros participantes, de una de una imagen virtual de, por ejemplo, la Plaza de Mayo”, contó Grosman y agregó: “De esa manera más de un millón de argentinos pueden seguir tus palabras y ser parte del acto”. La propuesta entusiasmo al presidente.
El pasado 21 de agosto, este portal anunció que “En silencio y con WhatsApp como única arma, se organiza una gigantesca movilización por los 75 años del 17 de octubre”. Contamos desde Info135 lo que estaba sucediendo en las bases, más allá de la dirigencia, para frenar de una vez por todas el avance de la derecha golpista.
“Estamos en guerra”, nos decían los militantes consultados por este portal; “No hay posibilidad de cerrar la grieta cuando nos quieren afuera del gobierno” o “Nunca aceptaron que ganamos las elecciones el año pasado”. Artemio López define el sentimiento de la gente frente al ataque que recibe el Frente de Todos. “La grieta está porque son dos proyectos de país diferentes, no hay división en Juntos por el Cambio y como ejemplo es que no hubo una sola crítica al programa económico durante el mandato de Macri de parte de los Monzó, Rodríguez Larreta o Vidal”, dice el analista.
Hoy por hoy, el 90 por ciento de los votantes del Frente de Todos consideran que no hay ninguna posibilidad de acuerdo con la oposición que solo busca desgastar al gobierno e intentar derrocarlo, como sucedió en muchos países de la América Latina, pero “acá existió el peronismo”, dice un intendente del gran Buenos Aires.
El peronismo tiene memoria histórica y sabe cuándo hay que salir a las calles. Los momentos y las circunstancias son diferentes pero está unido en un hilo conductor que la derecha nunca comprenderá. Si no se puede ir a las calles por la pandemia utilizará las herramientas del siglo XXI.
La derecha no comprende que el pueblo es una gran memoria colectiva que recuerda todo lo que parece muerto en el olvido. El peronismo es como el topo de la historia. A veces desaparece, porque el topo va por debajo de la tierra, pero nunca aparece para atrás, siempre va para adelante, siempre buscando la luz.
El 17 de octubre habrá streaming y uno o dos millones de argentinos gritaran fuerte en defensa del gobierno que conducen Alberto y Cristina.