El ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán, afirmó que es necesario un cierre “muy fuerte” de la circulación para evitar el colapso sanitario con el aumento de casos de coronavirus. “Desde el punto de vista sanitario y epidemiológico, que es el que debe primar ahora por sobre la dimensión política y social, necesitamos una medida drástica de por los menos15 días más”, dijo Gollán.
Luego señaló que espera tener una reunión con el ministro porteño para consensuar medidas. “Esperamos que ahora podamos consensuar medidas desde la política, es esperanzador que (Fernán) Quiros haya reconocido que se equivocaron con las proyecciones porque eso nos va a permitir trabajar en conjunto y tomar medidas”, agregó.
El ministro aclaró que el cierre debe incluir a los partidos de fútbol. “Si empezamos con las excepciones, todos van a empezar a decir: no hay clases, pero se juega al fútbol. Si hay algo drástico, tiene que ser drástico para todos”, planteó.
Y para que no queden dudas de la situación dramático aclaró: “Si no se toman decisiones firmes y no avanzamos con la vacunación, la imagen de saturación va a ser completa. Esto que está pasando acá, empieza a pasar en muchas ciudades del interior del país. La situación es gravísima, con un punto de saturación muy fuerte. Lo que sucede en el AMBA repercute en todo el país”, describió.
Qué dicen en CABA. En 48 horas, el gobierno porteño analizará la evolución de los contagios y la ocupación de las camas de terapia intensiva para definir las nuevas medidas frente a la segunda ola de coronavirus. “El sistema está tenso”, admitió hoy el vicejefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Diego Santilli, y agregó: “Tenemos que lograr que no suban los casos; si suben, tenemos que tomar mayores restricciones, sobre todo en la circulación”.
“Vamos a analizar hoy, mañana y pasado para ver la decisión que tomaremos el viernes”, indicó el funcionario, en relación al día que vence el DNU firmado por el presidente Alberto Fernández. Santilli, por otro lado, destacó los controles que realiza la ciudad de Buenos Aires para evitar la aglomeración de personas y para garantizar el ingreso seguro de los alumnos en las escuelas porteñas.