Elisa Carrió volvió a patear el tablero: en las últimas horas salió con los tapones de punta contra sus socios de Juntos por el Cambio que se resistían a facilitar el aval del Congreso al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda.
“Mi decepción es absoluta; no confío en nadie, solo en la Coalición Cívica”, sostuvo la ex diputada, y apuntó a los sectores de la coalición opositora que amagaron con abstenerse o rechazar con su voto el entendimiento con el Fondo por la deuda.
Durante una charla en el Instituto Hannah Arendt, Carrió aseguró que JxC hubiese hecho “un papelón histórico e internacional” si no colaboraba con la Casa Rosada en el acuerdo con el Fondo para honrar la deuda que contrajo Mauricio Macri, en 2018, por 44.500 millones de dólares. “Un default nos dejaba al borde de la desintegración argentina”, lanzó.
En ese marco, afirmó que se sintió “usada” en la coalición opositora (”me miran y no me escuchan”), y que sus socios “le faltaron el respeto” al no tomar su consejo y priorizar sus proyectos personales en el debate por la deuda.
“Aunque estemos solos [por la CC], vamos a honrar esta deuda con el Fondo. Un default era el mayor impuestazo a la sociedad”, argumentó.