En las recientes audiencias públicas para la tarifa de luz, a pesar de que no son vinculantes y luego empresas y Gobierno acuerdan los aumentos más allá de lo que se exprese mayoritariamente allí, las compañías pidieron:
– Transener, de Pampa Energía y que tiene el 85 % del transporte de energía del país, reclamó un 209 % de aumento.
– Edenor, del grupo Vila-Manzano, 89 % promedio de aumento en la factura.
– Edesur, del grupo Enel, no le puso número, pero dijo que “es necesario contar con una adecuación sistemática y efectiva” luego de que juguetearan con vender la empresa.
En cuanto a si son necesarios esos incrementos, de acuerdo a los balances de estas empresas, las más significativas del sector, indican que no.
Según precisa hoy el periodista Ari Lijalad en El Destape, Transener tiene prácticamente el monopolio de los cables de alta tensión. Y es un monopolio natural, ya que nunca tendrá competencia. No se pone una línea de alta tensión para competir con una existente. La empresa es del grupo Pampa Energía, que comanda Marcelo Mindlin. Empresario cercano a todos los gobiernos, hace unos días compartió un evento con el presidente Javier Milei en el Museo del Holocausto.
Esta empresa y sus socios reclamaron $ 256.349 millones, equivalente a un aumento del 209 %. Pero sus balances indican que de enero a septiembre de 2023 (últimos números presentados) tuvo ganancias por $ 19.252 millones, y una rentabilidad del 28,6 %. El número de la ganancia es alto, pero lo más relevante es su rentabilidad extraordinaria. En el mismo período de 2022 ganó 7.618 millones con una rentabilidad del 14,8 %. Es decir, entre 2022 y 2023 Transener duplicó su rentabilidad, según sus propios balances.
Los balances de Transener son públicos, están en su página web, e indican que le va muy bien. De hecho, informaron que en los primeros 9 meses de 2023 sus ingresos aumentaron “debido a los ajustes tarifarios de 154,5% y 154,1%, aplicables a partir de enero de 2023 sobre los valores vigentes desde febrero de 2022, y de 20,9% y 20,84%, aplicables a partir de agosto de 2023 sobre los valores vigentes desde enero de 2023”. Ahora quieren otro aumento del 209%.
Un dato para tener en cuenta: hasta finales del año pasado la canciller Diana Mondino tenía un lugar en el directorio de Pampa Energía como directora suplente.
En tanto, Edenor forma parte hoy del holding Vila-Manzano: Daniel Vila, próspero multiempresario mendocino, y José Luis Manzano, otrora ministro y diputado menemista reconvertido en empresario multirubro, especialmente en materia de energía y litio tienen, además de estos negocios, un grupo de medios para darle relato a sus intereses financieros.
El representante de Edenor en la audiencia pública, Guido Hernández, reclamó $ 521.303 millones y un aumento del 8 9% en la factura para el 80 % de los clientes de la compañía. Hernández dijo: “En el año 2022, Edenor alcanzó una pérdida de $ 110.000 millones, y solo por los nueve primeros meses del año 2023 registra una pérdida de $ 116.000 millones, todo a valores de diciembre de 2023”. Sin embargo, sus balances públicos dicen otra cosa.
En 2022 registraron pérdidas, pero de $ 17.468 millones, es decir mucho menos de lo que dijo. Y en los nueve primeros meses de 2023 informó ganancias por $ 132.729 millones de pesos. Exactamente al revés.
Edesur es del grupo Enel, que durante el año pasado hizo trascender que se desprendería de ella como parte de un plan a nivel global de venta de activos. Jorge Lemos, su enviado a la audiencia pública, dijo: “Esta Audiencia solo abarca el impacto de la inflación en la remuneración de Edesur. No implica ningún otro cambio tarifario. Por tratarse solo de una actualización, es imprescindible, por otra parte, comenzar y finalizar un proceso de revisión tarifaria para poder alinear la remuneración, el mecanismo de actualización y los niveles de calidad que la población desea”
El último balance de Edesur muestra que, de enero a septiembre de 2023, tuvo ganancias por $ 19.654 millones, con una rentabilidad del 7,4 %. En el mismo período de 2022 informó 26.140 millones de ganancia con una rentabilidad del 11,4 %. Es decir que su rentabilidad bajó, pero no pierde dinero.