Los gremios docentes nucleados en la Confederación General del Trabajo (CGT) -Unión Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) y la Confederación de Educadores Argentinos (CEA)- anunciaron su decisión de ir a un nuevo paro nacional, el próximo lunes 4 de marzo, después de que el Gobierno boicoteara la reunión por la paritaria nacional docente.
“Responsabilizamos al Gobierno nacional por las medidas que tomamos”, dijo Sergio Romero, secretario general de la Unión de Docentes Argentinos (UDA), durante una conferencia de prensa. “Estamos volviendo a los años 90. Hoy no hay dos provincias que paguen el mismo salario”, añadió, acompañado por los triunviros de la CGT, Pablo Moyano y Carlos Acuña.
Los líderes sindicales rechazaron la postura del Gobierno, denunciaron la falta de respuestas en materia salarial, y ratificaron la decisión de adoptar medidas de fuerza en todo el país.
“Fue una pérdida de tiempo porque no ofrecieron nada. Fue un diálogo de sordos, y hasta en un momento quisieron negar el ámbito paritario”, denunció Romero, en referencia a la reunión en el edificio de la cartera laboral.
“El Gobierno nacional se negó a responsabilizarse dentro del marco de la ley del financiamiento del sistema educativo argentino. Tuvimos una reunión sin ninguna respuesta”, subrayó. Además, declaró que no les ”han hecho propuestas”, y que tampoco se trató la mejora del salario inicial del sector docente, que ”hoy está en $250.000”, algo que se reduce ”aún más” y queda ”alrededor de los $220.000”.
De esta manera, Romero confirmó que esto ”los obliga a tomar medidas”, y advirtió que esto es el ”inicio de un plan de lucha que se extenderá” en el caso de ”no tener respuesta de parte del gobierno nacional”.
El líder sindical formó parte de la comitiva que se reunió con el secretario de Trabajo, junto a los titulares del Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP), de la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), de la Confederación de Educadores Argentinos (CEA), que estuvieron por la CGT, mientras que también participaron sindicalistas de la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA).
Por su parte, el secretario general de la CGT, Pablo Moyano, que también estuvo presente en la conferencia de prensa, manifestó su total apoyo a los docentes: “La CGT no va a mirar para otro lado porque se está deteriorando el poder adquisitivo”, expresó.
“A la CGT no la aprieta nadie, no pudieron los militares, no pudo Macri y menos va a poder este cachivache que es empleado de las corporaciones”, señaló, en relación al presidente Javier Milei.
Desde las representaciones sindicales ya habían advertido que no solo se debe discutir un nuevo piso salarial a nivel nacional, que hoy ronda los $250 mil, sino también los recursos de Nación destinados a garantizarlo, así como al financiamiento de una educación de calidad.
La reunión entre los representantes del Ejecutivo y los sindicatos docentes pasó a un cuarto intermedio hasta el martes próximo, cuando existirá una nueva convocatoria para destrabar el conflicto.