Tras la detención del supuesto responsable del crimen del playero Bruno Bussanich, ocurrido semanas atrás a sangre fría en una estación de servicio de Rosario, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció que “ya está entrando al Congreso de la Nación la Ley de Imputabilidad” que baja a 14 la edad para responsabilizar penalmente a los jóvenes que cometen delitos, en lugar de los 16 años que rigen actualmente.
El presunto sicario tendría 15 años, y el trágico hecho fue la trágica excusa perfecta que necesitaba el Gobierno para reflotar, una vez más, el debate sobre la Ley Penal Juvenil y bajar la edad de imputabilidad, para que los adolescentes que cometan delitos puedan ser punibles.
Sin lugar a dudas se trata de un tema que produce efecto mediático, tal como lo viene haciendo sistemáticamente la derecha toda vez que ocurre un hecho donde un menor de edad es imputado por un crimen, a pesar de que las estadísticas demuestran la poca incidencia de jóvenes en los crímenes.
“Acaba de ser detenido por la Policía de Santa Fe el asesino del playero Bruno Bussanich, de Rosario. Asesinato que destruye toda una familia. Es nuestra obligación que, en casos como estos, se haga justicia. Ya está entrando al Congreso de la Nación la Ley de Imputabilidad, para que nunca más crímenes como estos queden impunes”, escribió la ministra de Seguridad en X (ex Twitter), revelando además su irresponsabilidad a la hora de haber asegurado con toda certeza que se trata del autor del crimen.
Por su edad, el presunto asesino del playero no es punible, y su situación será derivada a la Justicia de Menores, motivo del oficialismo para llevar al debate parlamentario, nuevamente, la baja de la edad de imputabilidad, es decir, reducir el límite etario a partir del cual los adolescentes pueden ser juzgados por la Justicia e ir presos a una cárcel.
A la par del debate político que se desarrollará tras la presentación del proyecto que busca sancionar con cárcel el crimen adolescente, las fuerzas de seguridad continuarán el operativo y buscarán pistas para dar con cómplices y responsables intelectuales.
A su vez, el presidente Javier Milei apoyó la medida y sentenció: “El que las hace las paga”, mientras que su vocero presidencial Manuel Adorni completó: “Delito de adulto, pena de adulto”.
La iniciativa del oficialismo apunta a modificar la ley 22.278 sancionada en 1980 en la que se establece que “no es punible el menor que no haya cumplido los 16 años de edad”.
Por su parte, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, empezó a trabajar en el proyecto de ley que tiene como objetivo bajar la edad de imputabilidad para que los menores a partir de los 14 años puedan ser condenados como adultos.
Así lo anunció el propio funcionario a través de redes sociales: “Trabajando en la nueva Ley de minoridad con Patricia Bullrich y nuestros asesores que próximamente enviaremos al Congreso. Nuestro objetivo es tener una sociedad en la que triunfe la justicia”.
La publicación en X (ex Twitter) incluye también una fotografía del ministro escribiendo sobre su escritorio, en el despacho de una vivienda frente a la costa marítima, presumiblemente en Punta del Este.