Finalmente, la Justicia decidió avanzar en la causa en torno al escándalo provocado por la no distribución de toneladas de alimentos por parte del ministerio de Capital Humano, por lo que más allá de la pública defensa de Javier Milei hacia Sandra Pdettovello, está claro que la titular de esa cartera está transitando por una cuerda floja por su ineptitud y negligencia a la hora de resolver esta gravísima cuestión que afecta de manera directa a los más necesitados.
En las últimas horas, Gendarmería Nacional realizó en la localidad tucumana de Tafí Viejo un inventario de la mercadería que el Ministerio tiene en un depósito que administra y que se encuentra en una nave de los Talleres Ferroviarios, de 22 hectáreas.
El allanamiento se produjo en el marco de una denuncia contra la ministra Sandra Pettovello por incumplimiento de los deberes de funcionario público, debido a que los alimentos no estaban siendo distribuidos y se encuentran inmovilizados desde diciembre del año pasado, con riesgo de vencimiento.
Los gendarmes constataron la existencia de más de 2,7 toneladas de productos alimenticios, entre los que hay aceite de girasol, aceite mezcla, lentejas, garbanzos, leche en polvo, puré de tomate, pasta de maní y yerba mate. Del total, un poco más de dos millones, se encuentran listos para ser distribuidos, mientras que un poco más de 600.000 productos están en situación de laboratorio, a la espera de la autorización de parte de la autoridad de control de calidad para evitar que sean entregados en mal estado o vencidos.
La medida fue ejecutada por orden del juez federal de Tucumán, José Díaz Vélez, a pedido del fiscal federal Agustín Chit, en la causa “Pettovello Sandra s/ incumplimiento de deberes de funcionario”, que se inició el pasado 28 de mayo, a partir de una denuncia formulada por organizaciones sociales nucleadas en el Registro Nacional de Comedores y Merenderos Comunitarios.
En la orden efectuada, el Ministerio Público Fiscal tucumano argumentó sobre “la poca fiabilidad del Ministerio de Capital Humano, que públicamente autocuestiona su funcionamiento, por lo que da cuenta de la gravedad de la situación, en un contexto en que los efectos de lo discutido y sustanciado en este sumario, redunda en la salud de la población”.
En ese marco, se ordenó que: “Se registre en video las instalaciones y el estado actual de la mercadería allí almacenada y se constate en ese acto lo informado por el Ministerio de Capital Humano de la Nación en cuanto al tipo de producto, marca, lote y cantidad de alimentos y sus respectivas fechas de ingreso y vencimiento”.
Por su parte, el juez federal Sebastián Casanello ordenó inspeccionar el depósito donde hay alimentos acopiados por el Ministerio de Capital Humano, ubicado en la localidad bonaerense de Villa Martelli. Allí habría más de 339.000 kilos de leche en polvo que vencen en julio.
El lunes pasado, el magistrado había ordenado distribuir en comedores y merenderos los alimentos retenidos. Horas más tarde, el Ministerio de Capital Humano apeló la medida y la situación llegó a la Cámara Federal porteña.
Sin embargo, en un escrito dirigido a la Sala II de la Cámara Federal, el juez señaló que “no se ha dado cumplimiento ni se ha solicitado prórroga o suspensión respecto de la medida ordenada” el lunes y reclamó un “plan de distribución de los alimentos almacenados en atención a su tipo, cantidad, fecha de vencimiento y grupo de destino”.
El escándalo estalló el miércoles, entre la apelación y el mensaje de Casanello de este viernes. En un día cargado de rumores, el Ministerio de Capital Humano emitió un comunicado en el que reconocía la existencia de mercadería con fecha de vencimiento próxima y solicitó al Ejército distribuir los alimentos.
Fuentes del ex Ministerio de Desarrollo Social confirmaron que, cuando se produjo el cambio de gobierno, le avisaron a la ministra Pettovello que en ambos depósitos había más de seis toneladas de alimentos listos para repartir. “Pero no hicieron nada, los dejaron ahí”, señalaron. En efecto, alimentos, como arroz, hortalizas y yerba mate, que están en los depósitos, ya vencieron.
Este desastre en medio de un agravamiento histórico de la pobreza y la indigencia por el ajuste en marcha, con los comedores populares desbordados, no hace sino agravar la delicada situación de Pettovello, complicada por el escándalo de corrupción del pago de sobresueldos a sus funcionarios.