La Cámara de Diputados se prepara para el último debate de la Ley Bases y el paquete fiscal: el oficialismo busca sesionar el próximo jueves, mientras se intensifican las negociaciones con la oposición para que la iniciativa que aglutina el grueso del programa económico que pretende impulsar Javier Milei sea finalmente un hecho.
En la Cámara Baja se contemplan tres opciones: aprobar el proyecto con los cambios introducidos en el Senado, votar cada una de esas modificaciones, o debatir nuevamente la iniciativa original que se trató en Diputados.
La versión más firme que surge desde Diputados es que la Ley Bases saldría sin cambios de lo recibido en el Senado. Es decir, no se privatizarían Aerolíneas Argentinas, el Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina; se mantendría el Régimen de Inversión para las Grandes Inversiones (RIGI) con algunas restricciones, y se restablecería la moratoria de las jubilaciones.
En las últimas horas, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, confirmó que el oficialismo insistirá con los impuestos a las Ganancias y Bienes Personales y las privatizaciones. “Vamos a insistir con Ganancias y Bienes Personales, porque claramente desde nuestro punto de vista ese era un tema que favorecía mucho a las cuentas provinciales porque son impuestos coparticipables en el caso de Ganancias, en el caso de Bienes Personales porque están muy vinculados al blanqueo”.
Esta semana pondrá en juego el futuro de las alianzas del gobierno con los bloques dialoguistas. Si el debate en Diputados no mantiene las modificaciones hechas en el Senado, La Libertad Avanza corre riesgo de perder varios votos aliados importantes para negociar cualquier otra ley. Una advertencia que empezó a cobrar más fuerza con el paso de las horas y el pedido explícito para sostener los cambios discutidos hasta la semana pasada.
Este problema para el Gobierno fue advertido desde Diputados, incluso por una figura que está a favor de no respetarlos por no sentirse incluida en los pactos políticos. Pero también en el Senado ya se empezaron a sentir los estruendos. Si el gobierno no cumple con lo acordado, varios radicales adoptarán la posición de quitarle el respaldo a la hora de debatir leyes.
El punto de conflicto principal es el de las privatizaciones. Después de un arduo debate, Bartolomé Abdala, el miembro informante y presidente provisional del Senado, comunicó el retiro de tres compañías estatales del listado de empresas a rifar: Radio y Televisión Argentina; Aerolíneas Argentinas y Correo Argentino. Un trío de importancia suprema en el interior del país.
Hace diez días, cuando se inició el debate por la ley Bases y el pacto fiscal en el recinto del Senado, el oficialismo pidió retirar las tres empresas porque, de lo contrario, iban a perder todo el paquete de compañías a privatizar dado que el planteo fue en bloque. Todas o ninguna. Ante la chance ciertamente probable de que ganara la segunda opción, eligieron quitar las problemáticas para garantizarse el acompañamiento.