Alberto Fernández aseguró que el hematoma que sufrió Fabiola Yañez en uno de sus ojos fue producto de “un tratamiento estético contras las arrugas”, por lo que desmintió haberla golpeado, tal como afirmó su ex mujer en una entrevista.
Así lo dijo el ex presidente en declaraciones al sitio El Cohete a la Luna que hoy publica. Pese a que el portal dirigido por el periodista Horacio Verbitsky aclaró que la entrevista completa no podrá salir a la luz hasta que salga una primera que Fernández le concedió al diario español El País, adelantó cuál fue la explicación que dio el expresidente sobre los supuestos golpes que le habría dado a su entonces pareja.
“El expresidente alega que el hematoma no se debe a un golpe, sino a un tratamiento estético contra las arrugas”, citó el medio. “Su asombrosa explicación es que ella le pegaba a él durante las discusiones que admite frecuentes por el estado de salud de su esposa. Al defenderse él la tomaba de los brazos, lo cual explicaría los moretones”, señala Verbitsky sobre su charla con Fernández.
De este modo, Fernández cuestionó el relato de la supuesta agresión física con golpes, luego de que se viralizaran las fotos de moretones y lastimaduras de Yañez.
De todas maneras, el argumento esgrimido por el ex mandatario se contradice con los chats de la ex Primera Dama, donde acusa que sufrió agresiones físicas durante tres días.
“Si soy un golpeador, ¿por qué se sometió a un tratamiento de fertilidad para que tuviéramos un hijo?” manifestó Alberto Fernández en su versión de los hechos.
En ese sentido, el ex presidente cuestionó uno de los puntos cruciales de la denuncia de Yañez: “¿Por qué no hay un solo testimonio de alguien a quien ella le hubiera contado del alegado maltrato?”.
Y agregó: “Viví 17 años con Marcela Luchetti (la madre de su hijo mayor) y 10 con Vilma Ibarra, y no hay un solo episodio de que yo las haya agredido”, sentenció en relación a su conducta con anteriores parejas.
Por su parte, Fernández dice conservar chats con la madre de Yañez, en los que compartirían la preocupación por problemas de consumo de alcohol, y que “todo sería parte de una disputa económica”.