Más allá de la feroz campaña del presidente Javier Milei y de las redes de trolls contra el gobernador Axel Kicillof y el peronismo en general —al que culpan de la inseguridad en el conurbano—, la realidad de los vecinos es otra. La mayoría de los jefes comunales del Gran Buenos Aires superan los 50 puntos de imagen positiva, y algunos, como Leonardo Nardini y Federico Achával, se acercan al 70%.
El estudio mensual de CB Consultora Opinión Pública, dirigido por el analista Cristian Buttié, arrojó resultados muy favorables para el peronismo en el relevamiento de los 24 intendentes del conurbano. La encuesta, realizada a fines de enero, tuvo un margen de error de entre el 3% y el 4%, con un rango de entre 578 y 704 casos por municipio.
El intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, encabeza el ranking con un 66,5% de imagen positiva. Le siguen Federico Achával, de Pilar, con un 64,7%; Julio Zamora, de Tigre, con un 62,2%; Fernando Gray, de Esteban Echeverría, con un 61,8%; Mayra Mendoza, de Quilmes, con un 56,1%; Juan Andreotti, de San Fernando, con un 55,9%; Federico Otermín, de Lomas de Zamora, con un 53,7%; Juan José Mussi, de Berazategui, con un 52,5%; Mario Ishii, de José C. Paz, con un 48,7%; Mariano Cascallares, de Almirante Brown, con un 48,5%; Fernando Espinoza, de La Matanza, con un 48,4%; Lucas Ghi, de Morón, con un 46,3%; Mariel Fernández, de Moreno, con un 46,0%; Jorge Ferraresi, de Avellaneda, con un 45,7%; Fernando Moreira, de San Martín, con un 41,5%; Andrés Watson, de Florencio Varela, con un 41,3%; y Gustavo Menéndez, de Merlo, con un 40,7%. Solo tres intendentes peronistas se ubican por debajo de los 40 puntos de imagen positiva: Pablo Descalzo, de Ituzaingó, con un 38,7%; Damián Selci, de Hurlingham, con un 38,2%; y Julián Álvarez, de Lanús, con un 37,3%.
Más allá de la campaña libertaria contra el peronismo bonaerense, las tensiones entre la expresidenta Cristina Kirchner y el gobernador Kicillof persisten. La principal disputa radica en quién conducirá el proceso electoral de este año y en la decisión de unificar o no las elecciones provinciales con las nacionales. En los próximos días, el Congreso Nacional deberá resolver si habrá PASO, y a partir de ahí se determinará la organización del calendario electoral. Por un lado, los cargos nacionales se definirán con la Boleta Única de Papel, mientras que los provinciales seguirán con la lista sábana.
Cristina Kirchner prefiere que toda la votación se realice el mismo día, aunque con urnas separadas. En cambio, el gobernador Kicillof considera que lo mejor es dividir los procesos electorales entre los comicios provinciales y los nacionales. Los intendentes del peronismo respaldan esta última propuesta.
Mientras se define el futuro de las elecciones y los bonaerenses soportan una feroz campaña del gobierno nacional y de sus medios hegemónicos, los intendentes peronistas mantienen números muy positivos, que serán fundamentales el día de la elección.