
El peronismo bonaerense vive “sus horas más oscuras”, como en aquel histórico discurso de Winston Churchill ante la amenaza de invasión nazi sobre Inglaterra. En las próximas 24 horas, legisladores de La Cámpora y del Frente Renovador amenazan con aprobar un proyecto de ley para suspender las PASO y convocar a elecciones concurrentes, tal como lo promueve el Instituto Patria, en oposición directa a la propuesta del gobernador Axel Kicillof, quien insiste en desdoblar los comicios para ganarle dos veces a Milei.
Desde la Gobernación aseguran que dicho proyecto será vetado y confían en que los legisladores del peronismo recapaciten a tiempo para restablecer el diálogo. “Confiamos en que adviertan la gravedad institucional del momento”, expresan.
Kicillof ha sido claro: lo único que le importa es que “el peronismo no se rompa”. Asegura estar dispuesto a esperar todo el tiempo que sea necesario para dialogar, y le dice a su tropa: “Nosotros no seremos los responsables de una ruptura”.
Para evitar esa fractura, los legisladores de La Cámpora y el Frente Renovador no deberían aprobar el proyecto que busca obligar al gobernador a implementar elecciones concurrentes. Para lograr la mayoría, necesitarían sumar el apoyo de La Libertad Avanza, el PRO y algún voto radical. Por ahora, la vicegobernadora Verónica Magario, titular del Senado, se ha negado a una sesión conjunta, frenando momentáneamente lo que muchos califican de una locura institucional.
Más allá de lo que ocurra el martes, la senadora Teresa García advirtió que si el gobernador decide desdoblar las elecciones, Cristina Kirchner será candidata a diputada provincial por la tercera sección electoral. Desde el entorno del gobernador, un intendente respondió con ironía: “¿No era que lo más importante era la elección nacional? Ahora parece que el problema no es Milei, sino Axel”.
Ante tanta incertidumbre, desde este portal nos comunicamos con un histórico militante peronista, quien dejó una reflexión cargada de sabiduría. Citando a Perón en su charla con Fernando Solanas y Octavio Getino en 1971, recordó: “Cuando aparece un hombre de nuestro Movimiento que lucha contra otro hombre del mismo Movimiento, puede ser, como dice Mao, que se haya pasado al bando contrario. Pero generalmente defiende un interés, no un ideal. Porque quien defiende un ideal no puede tener controversias con otro que defiende el mismo ideal. (…) El Justicialismo creó un apotegma: ‘Para un peronista no puede ni debe haber nada mejor que otro peronista’. Entonces, ¿cómo es posible que en la misma lucha estemos combatiendo entre nosotros, cuando hay un enemigo al que naturalmente debemos enfrentar?”.
En este contexto complejo, resulta fundamental que Cristina Kirchner, la líder más influyente del peronismo, y Axel Kicillof, el dirigente con mayor proyección electoral, se reúnan a solas y unan fuerzas para frenar las políticas destructivas del presidente Javier Milei.