Argentina quedó en medio de la guerra comercial que desató el presidente estadounidense Donald Trump contra todo el mundo, y en particular contra China: luego de la visita ayer del secretario del Tesoro, Scott Bessent, quien aseguró que el Gobierno de Javier Milei debería cancelar el crédito con la moneda del gigante asiático, la embajada de ese país acusó este martes a la Casa Blanca de buscar “sabotear” el swap que la administración libertaria acaba de renovar con China luego del acuerdo con el FMI.
A través de un comunicado, la representación diplomática manifestó su “profundo descontento y categórico rechazo a las maliciosas difamaciones y calumnias” realizadas por Bessent, y puntualizó que “China acompaña a los países en desarrollo en su camino hacia el desarrollo sin imponer ningún condicionamiento político”.
Estados Unidos “debería abstenerse de obstruir o sabotear deliberadamente la asistencia que prestan otros países a las naciones en vías de desarrollo y del Sur Global”, indica la declaración que dio a conocer la sede diplomática china en Buenos Aires, que agrega contra Washington: “Tampoco debería sacrificar el bienestar de los pueblos de estas naciones para servir a sus egoístas intereses geopolíticos en defensa de su propia hegemonía”.
Así y todo, dejó claro que, a pesar de ese “proceder inmoral” de parte de Estados Unidos, “China va a preservar el multilateralismo genuino” y colaborar con los países en vías de desarrollo, como la Argentina.
La semana pasada el Banco Central selló con el Banco Popular de China extender el swap de 35 mil millones de yuanes (equivalentes a 5.000 millones de dólares) hasta 2026.
En una entrevista con la cadena Bloomberg luego de visitar la Casa Rosada, ayer Bessent planteó: “Tienen un swap de crédito de 18.000 millones de dólares en yuanes. Argentina, bajo el anterior gobierno peronista, obtuvo 5.000 millones de dólares, y esa cantidad seguirá pendiente. Los chinos mostraron un gran esfuerzo tras el anuncio, o en conjunción con el del FMI, por lo que se extenderá un año”.
Y agregó: “Creo que, a medida que esta administración mantenga su política económica inflexible, deberían eventualmente tener suficientes entradas de divisas para poder pagarlo”. En la misma entrevista, el secretario del Tesoro de Donald Trump descartó una línea de crédito directa desde el Tesoro norteamericano hacia la Argentina.
Curiosamente, anoche Milei negó que el propio Bessent le haya reclamado en su cumbre salir del swap con China. “No sé quién dijo eso, nadie me lo pidió, inventan”, sostuvo en su extensa entrevista con Alejandro Fantino. Pese a haber negado en la campaña electoral que iba a hacer “negocios con comunistas”, cuando llegó a presidente reconoció que China “no le pidió nada a cambio” para mantener la relación bilateral.
El comunicado de la embajada china refuerza ese planteo: “Es falsa la afirmación (de Bessent) sobre los acuerdos calificados de rapaces y las supuestas grandes cantidades de deuda en los que ha incurrido la República Popular China. Lo que sí es verdad es que algunas personas con motivos encubiertos están intentando sembrar discordias en las relaciones sino-argentinas”.
“China acompaña a los países en desarrollo en su camino hacia el desarrollo sin imponer ningún condicionamiento político”, aclara el texto de la sede diplomática que encabeza el embajador Wang Wei. Desde hace días China escaló su confrontación con Estados Unidos luego de la imposición de altos aranceles por parte de Trump.
“China siempre ha llevado a cabo cooperaciones pragmáticas con la Argentina en diversos ámbitos, incluyendo el swap, sobre la base del respeto mutuo, la igualdad y el beneficio mutuo”, continúa el comunicado, y señala: “A lo largo del tiempo, la cooperación Sino-Argentina con el swap ha desempeñado un papel importante en el mantenimiento de la estabilidad económica y financiera de la Argentina, lo que ha sido bien acogido y sumamente valorado por la parte argentina”.
China destacó, además, que la renovación del swap “también ha desempeñado un papel importante en la obtención del financiamiento pertinente del Fondo Monetario Internacional”, en referencia al acuerdo de U$S20.000 millones, de los cuales los primeros U$S12.000 entran hoy al Banco Central argentino.
Y concluye el comunicado de la embajada de China contra Estados Unidos: “En lugar de dedicar su tiempo y energía a desacreditar y atacar en forma recurrente a China, o señalar con el dedo a los países de región por sus cooperaciones con otros países, o intentar imponer una nueva versión de la Doctrina Monroe, sería mucho más productivo realizar contribuciones reales a favor del desarrollo de los países de la región”.