Falta un año para las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires y la dirigencia de Cambiemos parece estar nerviosa porque no le dan bien los números de las últimas encuestas y comete graves errores.
En el día de la fecha los alumnos de la Escuela provincial 3 de Villa Lía en San Antonio de Areco se encontraron en sus cuadernos de comunicados con una convocatoria especial: el PRO, con los sellos locales de CAMBIEMOS y la Juventud Radical de Areco los convocaba a una actividad partidaria violando completamente la ley y avasallando las libertades fundamentales de los chicos.
Desde el oficialismo que conduce Francisco “Paco” Durañona sacaron un comunicado repudiando el adoctrinamiento. “Desde San Antonio de Areco expresamos el más absoluto repudio por las acciones desarrolladas por CAMBIEMOS local en la escuela 3 de Villa Lía ya que las mismas son una total violación a los derechos de los niños y un abuso de poder absoluto por parte de los docentes hacia los niños y sus familias”, dice el comunicado firmado por los concejales del FpV, los consejeros escolares del Bloque FpV y los docentes adheridos a SUTEBA de la localidad.
El comunicado agrega que “manifestamos nuestra más severa crítica a los docentes que participaron de tal acto de “difusión” vulnerando todo tipo de derechos y pasando por arriba de todo formato institucional con el que cuenta un establecimiento educativo”. Luego exigen “a los directivos y docentes que ejecutaron este tremendo avasallamiento que den las explicaciones del caso y que se enfrenten al respectivo proceso judicial por haber violado el artículo 193 del reglamento de Instituciones educativas”.
Por último le piden a toda la comunidad que se ponga en estado de alerta “ya que utilizar partidariamente los cuadernos de nuestros chicos es una prácticas totalitaria y expresa un modus operandi poco democrático y agresivo. Para generar violencia no hace falta ejercerla físicamente, hay modos simbólicos, psicológicos de hacerlo, este es uno. ¡Con los pibes no!”
Habrá que esperar que medidas toma la gobernadora María Eugenia Vidal y su ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, sobre esta práctica que viola los derechos de los niños.