Tras la polémica que generó la definición de monseñor Aguer, diciendo que se vive bajo una “cultura fornicaria”, profundizó sus conceptos en el programa “Y ahora quién podrá ayudarnos” de Ernesto Tenembaum.
Escudándose en supuestas citas de Platón y Aristóteles, el obispo alegó que la masturbación es “animaloide”. Profundizando ese pensamiento, agregó que en realidad escribió una crítica sobre las costumbres mundanas, y disparó contra lo que califica como una “desnaturalización de la función sexual”.
“Los trajes de baños de los competidos olímpicos son demasiado pequeños, casi no llevan traje, es ridículo”, asestó contra los nadadores. “Me pareció raro y exagerada la cantidad de preservativos que se entregaron en los Juegos Olímpicos”, concluyó.
Para cerrar, Aguer concluyó con estas definiciones:
- Se desprecia el cuerpo, si uno no quiere ser varón y quiere ser mujer, se opera y listo.
- No estoy de acuerdo con la antropología básica de Freud.
- Un homosexual para vivir en gracia de Dios debe ser casto.
- Hay una cultura de desprecio al cuerpo que es mucho más contradictoria que el uso del cilicio como castigo.
- Para elegir el celibato a uno le tienen que gustar las mujeres.
- Nunca me he enamorado, elegí el celibato como una entrega a Dios y no me ha costado.
- El secretario de DD.HH debe pensar cómo van a salvar la libertad de expresión y de prensa de la Iglesia.