El gobierno de los Estados Unidos calificó como “arresto arbitrario” el caso de Milagro Sala en el capítulo argentino del informe global sobre Derechos Humanos que divulgó como todos los años.
En ese documento, menciona como principales problemas de nuestro país los “múltiples informes sobre corrupción, tortura por la Policía Federal y provincial y violencia de género”. También habla del uso excesivo de la fuerza por parte de la policía, las duras condiciones de las prisiones, detenciones prolongadas sin sentencia, la ineficiencia judicial, entre otros.
En cuanto a los arrestos arbitrarios, señala que el Gobierno en general respeta la prohibición, pero pone como excepción el caso de la líder de la Organización Barrial Tupac Amaru. El Departamento de Estado no pasa por alto y cita expresamente la resolución del Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas que en octubre pasado reclamó que se deje en libertad de inmediato a la dirigente social.
No es la única repercusión internacional que ha tenido el caso. Varios presidentes se lo mencionaron a Mauricio Macri en encuentros bilaterales, al igual que diversos cancilleres lo plantearon ante Susana Malconrra.
También la Comisión Interamericana de Derechos Humanos reclamó al gobierno argentino a liberar a la dirigente social. Enel mismo sentido se pronunció el Secretario General de la OEA, el uruguayo Luis Almagro.
Reconocidas organizaciones de la sociedad civil también vienen sosteniendo que Milagro Sala es una presa política y debe ser liberada. Es el caso de Amnistía Internacional, Human Rights Watch y Robert Kennedy Human Right, entre otras.
Gobierno de Vidal. En otro apartado del documento del Departamento de Estado se denuncian las “duras condiciones” de las prisiones argentinas, en especial las de la provincia de Buenos Aires, donde hay informes de traslados forzados de prisioneros y el uso recurrente de confinamiento solitario como método de castigo.
En ese aspecto, habla de 221 denuncias de casos de torturas por parte de fuerzas policiales en la provincia de Buenos Aires.
También resalta el drama de la creciente violencia de género, con más de 200 crímenes en 2015, muchos de ellos cometidos luego de que la mujer denunciara el acoso en la comisaría.