De una forma estigmatizante y repudiable, el diario Clarín representó al desaparecido Santiago Maldonado a través de una figura amenazante, violenta y con rasgos endemoniados, lo que contrasta notablemente con la expresión gentil del joven, tal como se aprecia en las numerosas fotografías que circulan por las redes sociales.
Fue a través de una “caricatura” del dibujante Hermenegildo Sabat, que recuerda a imágenes similares que formaban parte de las campañas gráficas durante el Tercer Reich, en tiempos de Adolf Hitler.
Y está claro que de esa manera el objetivo apunta a que, de manera inconsciente, los lectores de “el gran diario argentino” terminen justificando la desaparición de Santiago.