La justicia de Jujuy dispuso hoy el traslado de Milagro Sala a una vivienda de la localidad de El Carmen adonde había cumplido prisión domiciliaria durante un mes, y no a su casa, ubicada en Cuyaya.
Por esa razón, la defensa de la dirigente social denunció que la medida -que incluye el monitoreo electrónico y las restricciones de visitas-, “desobedece las resoluciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y de la Corte Suprema argentina”, que ordenaron que sea trasladada a su vivienda habitual.
Al respecto, uno de los abogados de la defensa de Sala, Luis Paz, reprochó que la prisión domiciliaria se efectuará “con las mismas condiciones de restricciones y obligaciones impuestas por el juzgado”, similares a las carcelarias.
Cuando en agosto pasado Milagro por primera vez había sido trasladada a El Carmen, se había establecido que su permanencia en el lugar implicaba un monitoreo electrónico y restricciones de visitas para familiares y amigos.
“Creemos que el Estado Argentino sigue en incurso en responsabilidad internacional, no solamente desobedeciendo a la Corte Interamericana, sino que la justicia de Jujuy incluso está desobedeciendo a la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, dijo el letrado.
En un fallo dictado el pasado 6 de diciembre, el máximo tribunal de Justicia había confirmado la prisión preventiva de Milagro Sala y ordenado a la vez que se cumpliera con urgencia con el fallo de la Corte Interamericana sobre la prisión domiciliaria.
La líder de la Tupac Amaru está detenida desde enero de 2016 por múltiples causas que fueron variando, desde el acampe frente a la gobernación jujeña, hasta un ataque con huevazos al por entonces senador Gerardo Morales, y presuntos casos de corrupción.