El Banco Central, a cargo de Federico Sturzenegger finalmente bajo la tasa de interés del 28,75% al 28%, lo que significa unos escasos 75 puntos, cuando desde el gobierno nacional y los mercados apostaban entre 160 y 200 puntos, para que la tasa quedara en 27 o en 26,50.
Más allá que fue la primera baja en 13 meses, el recorte fue menor a lo esperado. En un comunicado, la autoridad monetaria, recordó que “en la última semana de 2017 se anunció el diferimiento de la meta de inflación de largo plazo (5% anual) al año 2020, y nuevas metas intermedias de 15% para 2018 y 10% para 2019. Ese sendero es ahora el objetivo de la política monetaria del Banco Central de la República Argentina (BCRA)”.
El Banco Central dijo que “será cauteloso en la adecuación de la política monetaria al nuevo sendero de desinflación. Naturalmente, si se busca una menor velocidad de desinflación que la planeada originalmente, corresponde un sendero de política monetaria menos contractivo que el que antes se preveía. Pero esa moderación en el sesgo contractivo sólo podrá sostenerse en el tiempo en la medida en que la evolución de la desinflación sea compatible con la trayectoria buscada”.
El comunicado del Banco Central admite que el Índice de Precios al Consumidor de diciembre vendrá con un nuevo salto por los aumentos en luz y gas, pero afirma que “en la visión del BCRA el proceso de desinflación se ha encarrilado a lo largo del último semestre”.