Un ‘aplanamiento’ de las tarifas para los períodos de mayor consumo y la posibilidad de pagar en cuotas, fue el principio de acuerdo que hoy alcanzó el Gobierno nacional con las fuerzas políticas que forman parte de Cambiemos. Lo que no queda claro es si a esa financiación se le aplicarán intereses.
Es que la cuestión tarifaria está a la orden del día, y en la Casa Rosada ya no pueden disimular más la preocupación que el tema genera, después del ruidazo de ayer, y a horas de lo que será la llamada “Marcha de las Velas”.
“Acá hay realismo, ni populismo ni demagogia”, dijo el diputado Mario Negri (UCR), al término de la reunión que, encabezada por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, lo acompañaron Nicolás Massot -del PRO- y Juan Manuel López, de la Coalición Cívica-ARI.
“Las tarifas deben comenzar a pagarse”, sentenció Massot. Dijo que “un porcentaje importante de la facturación total va a poder financiarse y esto será optativo”. Sin embargo, no aclaró si la financiación será con cargos adicionales.
Así, se estaría a las puertas de una solución política que surgió entre los referentes partidarios y legislativos convocados por Mauricio Macri para discutir un nuevo esquema tarifario, en la búsqueda de atenuar el impacto de los aumentos de luz y gas.
De todas maneras, el presidente ya venía advirtiendo que abría el canal de negociación con la condición de que ninguna iniciativa pudiera comprometer la meta de reducir el déficit fiscal. En otras palabras, el Gobierno está dispuesto a escuchar alternativas posibles, pero se prioriza el hecho de que hay un Presupuesto y una situación fiscal que respetar.
Previamente, Macri había recibido al gobernador de Mendoza y titular de la Unión Cívica Radical (UCR), Alfredo Cornejo, quien le presentó una propuesta elaborada por su partido, para “mitigar el impacto de los aumentos en las tarifas del gas”.
Al encuentro se sumó el ministro de Energía, Juan José Aranguren, quien había sido duramente criticado por el gobernador radical, que lo acusó de haberle hecho “meter la pata al Gobierno muchas veces” con los incrementos tarifarios.
Cornejo aclaró que su planteo “es a los efectos que Cambiemos salga fortalecido en una situación del plan económico y de la línea correcta del plan económico, que no puede ofrecer todavía resultados producto de un montón de instrumentos de la bomba de tiempo que dejó montada el kirchnerismo y el populismo”.
Y agregó que su iniciativa, basada en el aplanamiento de las tarifas y la postergación del pago de consumos en invierno al verano, “no tiene costo fiscal”.
El titular de la UCR explicó que su idea propone prorratear el mayor consumo de los bimestres 3, 4 y 5 (temporada invernal), en el consumo del sexto de este año y del primero y segundo del siguiente (temporada estival); posponer el 50 % de la última cuota de la Revisión Tarifaria Integral, pasándolo a octubre de 2019 y aplazar las modificaciones en la estructura de la tarifa social.