Más que aliados, amigos. Mariano Rajoy era lo más parecido a Mauricio Macri en versión española. Incluso Macri había dicho que Rajoy “es un ejemplo de liderazgo, honestidad y empuje”. Y, como si fuera poco, sus políticas se parecían bastante: reforma laboral, ajuste y represión. Ahora, Rajoy fue obligado a renunciar por los tremendos casos de corrupción en los que se vio envuelto, y así el presidente argentino se queda sin su principal socio en Europa.
“España es un camino a seguir para nosotros, es un país muy cercano, y si estamos juntos, vamos a tener más chances de estar dentro de los (países) ganadores”, dijo Macri cuando viajó a la nación ibérica el año pasado.
En aquella visita de Macri a España, Rajoy señaló que las reformas del presidente argentino iban a ser duras, y pronosticó que al final del camino triunfaría con una mejora de las cuentas, tal como él hizo en España.
“Son como dos amantes que se reencuentran”, había dicho Macri sobre las relaciones Argentina-España que atravesaron momentos de enorme tensión con el gobierno de Cristina Kirchner.
En tanto, durante la visita del ahora destituido mandatario español a nuestro país en abril pasado, Rajoy exclamó que “la Argentina ha hecho un magnífico trabajo en lo económico y esto abre oportunidades”, y sentenció: “Somos dos gobiernos en plena sintonía sobre política económica y exterior”.
Mientras tanto, por estas horas reina el silencio por parte de la administración macrista, que no dijo una sola palabra sobre la salida de Rajoy del gobierno español.