Todas las encuestas, cercanas o no del gobierno, reconocen que desde diciembre no para de caer la imagen del presidente Mauricio Macri y de su gestión. Una inflación imparable, aumento de la desocupación, tarifas y transporte carísimo y los alimentos por las nubes. No solo perjudica a los sectores más humildes sino también a la clase media que lo voto masivamente hace tres años.
En una encuesta realizada por el Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP), que lidera Roberto Bacman, afirma que 8 de cada 10 argentinos dicen que la economía del país está mal o muy mal y el 63% considera que el rumbo económico está errado.
“Los últimos diez meses han sido realmente difíciles para al gobierno. El período más frustrante de su gestión: la economía fuera de control, el dólar con una devaluación descomunal, la estanflación tan temida campeó por estas latitudes, la necesidad de volver a pedir la asistencia al FMI cuando se había anunciado lo contrario y especialmente las ilusiones dejadas en el camino y las promesas incumplidas”, señala Bacman.
El Ceop le pregunta a cada encuestado si se considera oficialista, opositor o independiente. Hoy en día, las proporciones son que el 22 por ciento de los consultados se autodefinen como oficialistas, el 45,5 por ciento se manifestaron opositores y el 31 se ubica como independiente. Ya de por sí es una situación complicada porque el macrismo partió, en 2015, de un cuadro donde los oficialistas eran más que los opositores. Ahora éstos duplican a los oficialistas.
La consultora Synopsis, cercana al gobierno, afirma que los temas que preocupan a los argentinos son la inflación (40,1%) y el desempleo (18,8%). Ambas impulsan las preocupaciones económicas al 58,9%. La gente esta preocupada por la situación económica y la percepción negativa llega al 73,1%, mientras que los que consideran que hoy el país está mejor que un año atrás solo representan el 4,4%.
Al mismo tiempo, se registró una caída de la preocupación por la corrupción (-5,3%), que queda relegada al tercer lugar en el ranking de preocupaciones, más allá que los medios hegemónicos machacan día tras día con ese tema.
En materia electoral, esta encuestadora señala que Cambiemos y el kirchnerismo empatan en 32 puntos y sigue el peronismo federal con un 10%.
Según la encuestadora, el 47% de los argentinos no quiere que vuelva al gobierno Cristina Kirchner, pero reconocen que en un año creció un 11% la gente que si quiere que vuelva CFK, mientras que descendió en un 5,5%.los que se oponían.
Por su parte, la encuestadora Isonomía, también cercana al gobierno, afirma que la imagen positiva de la clase media hace unos meses rondaba al 60% y ahora descendió a un 40%. “La erosión se viene dando desde diciembre. Esa caída, que se da en todos los segmentos, recrudece en los segmentos medios porque allí es una caída casi constante o con pocos movimientos ascendentes”, afirmó Pablo Knopoff, director de Isonomía.
En una encuesta realizada por Raúl Aragón en Capital Federal, el 42,5% de los consultados de nivel socioeconómico medio manifestó estar “preocupado” con el Gobierno, y un 22,6% dijo estar “enojado”. Solo un 13,2% de los encuestados de clase media se mostró “conforme”. Números similares plante la consultora Aresco y Opinaia.
El presidente sigue cayendo en su imagen cuando todavía quedan entre 6 y 8 meses de recesión, con lo cual desde el poder económico y mediático ya se piensa en una cara nueva: Vidal o Larreta.