Luego que el gobierno no pudiera implementar el dudoso voto electrónico para las elecciones presidenciales de este año, ahora aparece un polémico proyecto para eliminar los telegramas electorales de las escuelas que resguardados iban al centro de cómputos.
La idea, contada hoy por el diario oficialista La Nación, es que las escuelas se conviertan en un centro de transmisión de datos, por lo cual no habrá telegramas ni camionetas retirando los sobre lacrados. El gobierno ya presentó la propuesta a la Justicia Electoral y aún deben comunicarle el proyecto al resto de los partidos políticos.
El Gobierno prepara un escrutinio para que cada escuela funcione como un centro de transmisión. Para ello, ya se firmó un convenio entre la Dirección Nacional Electoral (DINE) y el Ministerio de Educación para tomar en préstamo 15.000 netbooks del programa Educ.Ar e igual número de equipos multifunción para así poder escanear y fotocopiar las actas dentro de cada una de las instituciones educativas elegidas como puntos de votación.
A fines del año pasado el Ministerio del Interior contrató de forma directa al Correo Argentino -una sociedad del Estado que está bajo la órbita de la Secretaría de Modernización- para la realización del escrutinio.El Correo Argentino, a su vez, ya lanzó la licitación para contratar un software que permita la transmisión digital de las actas de votación en todas las escuelas del país.
En el día de hoy, Mempo Giardinelli, publico una nota en Pagina 12 donde anticipa en el primer párrafo lo que muchos argentinos tememos: un posible fraude electoral. Dice Mempo: “Tod@s lo sabemos: nuestro país está en una emergencia gravísima, terminal. Y si acaso este gobierno fuera reelecto (no es electoralmente imposible, y además es muy probable que hagan fraude, electrónico y manual), los siguientes cuatro años serán horrorosos porque se ocuparán de que el daño sea irreversible”.