A partir de mayo, el Ministerio de Seguridad bonaerense comenzará a controlar la asistencia y el cumplimiento del régimen horario de los efectivos de la policía con lectores de datos biométricos.
Los dispositivos, que ya funcionan en la Gobernación y en varios ministerios, serán instalados en las comisarías y destacamentos pero también en Caballería e Infantería. Seguridad ya compró 200 equipos, que constan de una tablet con cámara y un lector de huellas para el ingreso y egreso para los policías.
En mayo comenzarán a funcionar en La Plata paulatinamente, ya que primero se debe capacitar al personal y ajustar los defectos del sistema que puedan ocasionarse. En junio se empezaría a incorporarse en el conurbano, sumando a Mar del Plata y Bahía Blanca y, a partir de julio, en el interior de la provincia.
El hecho que decidió al ministro Cristian Ritondo a incorporar el sistema biométrico fue que el sistema actual en base a la firma de planillas de asistencia permitía trampas e irregularidades a tal punto que se detectó que concurrían menos policías de los declarados a cada partido de fútbol. A raíz de esto, el gobierno debió devolver dinero a los clubes de fútbol por los servicios no prestados.