A pesar de que se presentan todos los condimentos típicos de un golpe de Estado, el gobierno argentino confirmó que seguirá manteniendo la postura de que lo que ocurre en Bolivia es una crisis que terminó con la renuncia de Evo Morales a la presidencia.
Así lo dejó en claro Mauricio Macri durante la reunión de gabinete que encabezó hoy en Casa Rosada, oportunidad en la que insistió a sus ministros y secretarios que lo que está sucediendo en el país vecino “por ahora no es un golpe de Estado”.
A menos de un mes de dejar el poder, el equipo ministerial se abocó sobre todo a la situación en Bolivia, oportunidad en la que Macri no hizo más plantear lo que poco después transmitió el canciller Jorge Faurie en la conferencia de prensa, cuando consideró que “no hay elementos para definirlo como golpe de Estado”.
Testigos de la reunión de gabinete indicaron que el “por ahora” usado por el presidente, tiene que ver con el hecho de que todavía “se trata de un proceso que está ocurriendo” en Bolivia, y cuya definición podría hacer cambiar la definición del jefe de Estado. “Si mañana las Fuerzas Armadas o alguien se apropian del poder, bueno ahí sí se podría hablar de un golpe”, aclararon.
“Está en un proceso y no se puede calificar algo que no terminó. Hay que esperar y llamar a la tranquilidad, para que los bolivianos puedan resolver la sucesión”, reflexionó uno de los presentes en la reunión.
En el gabinete, sin embargo, cuestionan la actitud de las Fuerzas Armadas bolivianas, que lo presionaron a Evo Morales para presentar su renuncia, y así “permitir la pacificación y el mantenimiento de la estabilidad”.
Y al mismo tiempo, se cuestionó lo que definieron como la “doble vara” de la oposición argentina, que viene criticando duramente a Macri por no hablar de golpe de Estado.
Al respecto, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, recordó el caso del gobierno de Fernando de la Rúa, del cual fue parte. “Cuando acá sacaron un gobierno por la fuerza era la resistencia popular. Así lo contaron ellos. ¿Y Bolivia con fraude, violación a la Constitución y demás, es golpe de Estado? No se puede mirar la realidad con una sola vara”, sostuvo.
En ese sentido, la funcionaria no se privó de criticar al presidente electo Alberto Fernández, por lo que – según entiende- se trata de una distinta vara respecto al análisis que hizo de la crisis en Bolivia respecto a lo que ocurrió en Chile. “Allí de la violencia no dijo ni ‘mú’ (sic)”, ironizó.
Y ante las críticas opositoras, el mensaje que surgió en la reunión y que ya comenzaron a trasladar los ministros a sus dirigentes fue: “No podemos ser comentaristas de lo que pasa en Bolivia. No podemos decir cualquier cosa, porque tenemos una responsabilidad institucional”.
2 Comentarios
Macri, Vidal, Larreta : CÓMPLICES GOLPISTAS !
Deleznable actuación de la OEA y su operador americano Luis Almugre.