A pesar de no haber alcanzado un acuerdo con el 75 % de los acreedores, finalmente la provincia de Buenos Aires no declarará el default de su deuda, ya que pagará con fondos propios, y sin asistencia de la Nación, los 250 millones de dólares correspondientes al bono BP21.
Así lo anunció esta tarde el gobernador Axel Kicillof durante una conferencia de prensa, oportunidad en la que lamentó que pese a haber obtenido manifestaciones de respaldo de bonistas individuales a la propuesta de postergación de pagos de un vencimiento de deuda, “hubo un fondo que mostró una posición bloqueadora y no tuvo la misma actitud constructiva y de diálogo”.
Y tal como él mismo lo admitió durante el encuentro con los periodistas en la Gobernación, en La Plata, se trata del fondo Fidelity, que posee no menos del 25 % de los bonos. El gobernador indicó que este fondo “pretendió negociar de otra manera, y ofrecía cobrar todo pero en cuotas, lo que no constituye una solución para la provincia”.
“Estamos denunciando esta actitud, la estamos repudiando. Actuamos de buena fe. Y lo estamos haciendo con total responsabilidad con respecto a los resultados y a los efectos que puede tener esto sobre la provincia de Buenos Aires y obviamente también sobre la República Argentina”, dijo.
Sin mencionarlo directamente, el mandatario bonaerense dijo que Fidelity “no quiso entender la situación financiera de la provincia”, y no adhirió a la propuesta inicial de postergar parte del pago hasta mayo.aaa
Fidelity, el mayor fondo de inversión del mundo con recursos gestionados por 418.000 millones de dólares en los cinco continentes, exigía cobrar toda la deuda en cuotas, pero antes de mayo, que era el mes propuesto por el gobierno provincial. Ese fondo tenía la potestad de bloquear toda la operación propuesta por Kicillof dado que administra más del 25 % del bono BP21, lo que tornó imposible que se alcanzara la adhesión necesaria del 75 %.
“Entendemos que la mejor solución posible es usar los recursos que hemos recaudado en estos días (9.300 millones de pesos) para afrontar el vencimiento con recursos propios de la provincia, sin asistencia del gobierno nacional”, anunció. Ese dinero fue captado por la provincia con la colocación de una letra el viernes pasado en el mercado doméstico y ahora se usará para adquirir los dólares necesarios para abonarles a todos los tenedores del papel BP21.
Kicillof dijo que la situación global de la deuda bonaerense es “insostenible e impagable” en las condiciones actuales, dado que sólo este año hay vencimientos por $ 220.000 millones, lo que representa el 15 % del total de recursos disponibles en la provincia por todo concepto.
En tal sentido, responsabilizó a las gestiones de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, de quienes dijo dejaron “una deuda impagable” tanto por los montos como los plazos. En este marco, señaló que su antecesora elevó la deuda provincial de 9.300 millones de dólares a 11.300 millones de dólares. Según dijo el mandatario, “medida en pesos la deuda se multiplicó por cinco”.
“Se emitieron durante los cuatro años pasados 5.000 millones de dólares. Y durante los ocho anteriores la emisión había sido de 2.500 millones”, remarcó.
Por otra parte, anticipó que en los próximos días se va a dar a conocer un cronograma que estará en consonancia con el de la Nación, es decir, los pasos a seguir para la reestructuración de la deuda, según dijo Kicillof, acompañado por el ministro de Hacienda y Finanzas, Pablo López.