Dos intendentes de Juntos por el Cambio oficializaron en las última shoras su intención de salir del sistema de fases de la cuarentena dispuesto por el gobierno de Axel Kicillof y disponer sus propias flexibilizaciones como ya había hecho el municipio de Tandil.
El intendente de Chacabuco, Víctor Aiola, anunció un sistema propio que comenzó a regir esta semana y aseguró que el sistema de fases impuesto por la provincia “está agotado”.
El jefe comunal explicó que abandonará ese esquema, que evalúa el pase de una fase a otra de acuerdo a la cantidad de casos positivos, y propuso poner un marcha un sistema de “intermitencia” de “etapas” en función de la ocupación de camas con un corte cuando llegue al 25%.
“Yo se lo planteé al gobernador que con mucha amabilidad me escuchó, me dio la palabra, le planteé que el sistema de fases estaba agotado y que nosotros lo que tenemos hoy que mirar son los aumentos de casos pero fundamentalmente el porcentaje de ocupación de terapia intensiva y de los respiradores, de la tercer ala y de internación general”, explicó.
“Hoy yo retroceder de fase no lo creo necesario. No solamente yo, sino el Comité de Salud y el área de Salud a los cuales nosotros seguimos apoyándonos firmemente en salud porque para nosotros es fundamental el cuidado de la salud y que no se desborde nuestro sistema”, describió.
El otro jefe comunal que se rebeló es el de General Viamonte, Franco Flexas, quien exigió que se reanuden las clases presenciales, cuestionó el control del gobierno provincial y advirtió sobre la posible “rebeldía” de la gente.
“Vemos el sentir de la gente y la necesidad económica, y esto ya no va para más. Estamos a punto de una rebeldía ciudadana en cuanto a la cuarentena. Por eso hay que tener una justa visión del tema, necesitamos que la Provincia escuche y encuentre la manera de hacer apertura porque si no vamos a encontrar a las personas en rebeldía”, señaló Flexas.
El primer rebelde fue el intendente de Tandil, Miguel Lunghi, quien decidió crear un sistema de semáforo epidemiológico más flexible que el que aplica la provincia, con el objetivo de mantener determinadas aperturas que no están habilitadas en las fases 4 y 5 oficiales.
Esa decisión fue duramente criticada por el gobierno provincial y, en especial, por el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, quien precisó que en la primera semana que se aplicó se duplicó el número de casos en esa ciudad serrana debido a la mayor circulación permitida por el intendente.
1 comentario
QUE SE HAGAN CARGO LOS INTENDENTES , GOLPISTAS SI LE SUBEN LOS CASOS, QUE NO VAYAN DESPUÉS A PEDIR AYUDA A LA PROVINCIA!!