En una reflexiva nota de El Cohete en la Luna, el periodista Horacio Verbitsky, analiza lo sucedido en el velatorio de Diego Maradona. Más allá de sus críticas acertadas sobre el equivocado manejo del gobierno nacional, sin descartar la violencia de la policía de Rodríguez Larreta, se detiene en un análisis sociológico sobre quienes vinieron a despedir al máximo ídolo que dio el deporte en la Argentina.
Verbitsky cuestionó que los funcionarios del gobierno de Alberto Fernández encargados del acto no tenían experiencia en grandes actos multitudinarios y mucho menos de quienes vendrían a despedir al Diez. Según el periodista el presidente se equivoca, como lo plantearon los medios de comunicación, que eran barras bravas los que armaron el caos. Un dirigente social del kirchnerismo dice otra cosa, a lo suscribe Verbitsky: “Lo que apareció en la plaza fue el conurbano profundo, ese que representaba el Diego, que no va mucho a la capital. Las organizaciones sociales representamos un cachito de eso, pero solo un cachito, que es lo organizado, la inmensa mayoría no. Es base social del peronismo por motivos múltiples y el jueves fueron maltratados. Creo que suceden estas cosas porque nuestros dirigentes empezaron a creer que esa gente es igual a aquellas con las que interactuan por twiter, nuestros dirigentes cada vez se parecen menos a nuestro pueblo. Lo del jueves va a quedar en la memoria, fue una señal, la realidad nos golpeó la puerta, espero que se tome nota y podamos corregir”.
Luego agrega: “Que la agenda de gobierno cuide a esa base social en la que también está el reclamo de Libertad a nuestros presos políticos, que son tan negros como los que estaban ayer en la plaza o como los que abundan en los penales de todo el país, o como los que se cagan de hambre y siguen apostando a organizarse alrededor de una olla de un comedor, también maltratados con comida para perros que es la que reparte Arroyo. No es un problema de comunicación es un problema de empatía con lo que decimos que queremos representar”.
La misiva reproducida por Verbitsky finaliza con una durísima reflexión: “Si no tomamos nota de esto va a llegar el día en que los gorilas van a venir por el gobierno de verdad y los de abajo no van a defenderlo. Pienso en lo que pasó con Dilma y Lula en Brasil. Siempre pienso en Lula en el sindicato esperando que los de abajo vengan a bancarlo y nunca aparecieron porque hacía rato que ya no estaban y el PT nunca se dio cuenta”.
La dirigencia del Frente de Todos debería dejar de pensar que la política pasa por Twitter, por Juntos por el Cambio, por Clarín y La Nación y concentrarse en como crear trabajo y sacar adelante a los millones de argentinos que, como en 1945, son el subsuelo de la Patria, y que solo el peronismo puede acordarse de ellos.