En el mes de enero del año pasado, antes que explotara la pandemia, estos grandiosos músicos de jazz entraron al estudio para grabar un disco excepcional. Me refiero al saxofonista David Liebman, al trompetista Randy Brecker, al pianista Marc Copland, al bajista Drew Gress y al baterista Joey Baron.
Cinco talentos que unidos potenciaron la música hasta dejarte sin aliento. Modernidad y tradición jugando al límite de la creación, con todo el swing y la potencia que te lleva en el recuerdo de los grupos del genio de Charles Mingus.
El disco comienza con Mystery Song de Ellington, un arreglo muy moderno de una canción de 1931, realizada por Copland. El segundo tema es Off a Bird, de Liebman pensado en Charlie Parker, con un dueto increíble de Liedman y Brecker.
Luego llega Figment, un tema de Drew Gress de gran sutiliza donde disfrutamos del piano de Copland y obviamente del contrabajo. Sigue Broken Time de Joey Baron con esa exquisitez para componer melodías donde se destaca lo compacto del quinteto, sobresaliendo la trompeta de Brecker y el saxo de Liedman.
Moontide es de Brecker y merece escucharse el solo del trompetista con una limpieza exquisita, acompañado por Gress y Baron. Child at Play pertenece a Liebman y está dedicada a su hija pequeña. Luego se repite Broken Time (reprise), convertido en balada, destacándose Copland en el piano.
Luego viene There’s a Mingus Amonk US, de Brecker. Un tema donde el grupo sigue mostrando todo el potencial con un swing increíble. El ultimo tema es Pocketful of Changede Baron. Otra balada donde todos se destacan nuevamente.
Extraordinario disco para escuchar con un buen cigarro, una copa de vino y a todo volumen aunque tus vecinos se molesten.
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