El panelista nac&pop, hastiado de las continuas interrupciones del relator gorila, se le paró de manos al aire y lo partió como un queso.
Branca intentaba dar su enfoque sobre el escándalo del fallo de la justicia en CABA y como es costumbre de Paulo, comenzó a chicanearlo.
Pero Diego, lejos de achicarse, se le plantó y lo dejó al borde del infarto