El doctor “Hubris” volvió a las andadas: ahora se atreve con Diego, y hasta publicó un libro con la historia clínica del “10”

Fiel a su costumbre de diagnosticar a la distancia aprovechando su condición de médico, Nelson Castro, más conocido como “doctor Hubris” ahora se atrevió a hacerlo nada más ni nada menos que con Diego Armando Maradona, y hasta acaba de publicar un libro, tal como años atrás lo hizo con una de sus grandes obsesiones, Cristina Kirchner.

“La salud de Diego: la verdadera historia”, es el título del libro que narra toda la historia clínica del mejor futbolista de la historia, desde su nacimiento hasta el día de la muerte.

Entrevistado por Ernesto Tenembaum para promocionar el lanzamiento, el periodista ultramacrista lanzó un polémico diagnóstico sobre “El 10”: después de adelantar algunos capítulos del libro, Castro lanzó sin ningún tipo de filtro: “Maradona era un hombre que entre sus adicciones estaba el sexo, eso hay que tenerlo en cuenta”.

Aseguró que la trayectoria física del ídolo está “contada desde las fuentes médicas, los que directamente atendieron a Maradona, que agregan claridad a cosas que no estaban definidas”.  Además, Castro llegó a la conclusión que, de acuerdo a la información que recogió, la relación de Diego con las drogas habría arrancado “en la época de Boca Juniors”, es decir, en el año 1981.

“Maradona tenía una vocación de superación tremenda e imparable, y además tenía un cuerpo excepcional. Él empezó a drogarse en Boca. Alfredo Cahe (su tercer médico personal) da registro de que Maradona tenía una personalidad adictiva desde muy temprano. La adicción estaba temprano en Maradona”, sentenció Castro.

En cuanto al sexo, dijo: “Tenía una voracidad sexual impresionante, cosa que se ve en el caso de Cuba. Siempre tuvo un entorno de mujeres muy complicado, que fue una pesadilla para Claudia Villafañe. Era un hombre rodeado de mujeres y que permanentemente estaba en la búsqueda de mujeres”.

“Aunque todo lo escrito aquí es real, la historia que está a punto de comenzar tiene ribetes novelescos y, por momentos, supera cualquier ficción imaginable”, expresó Castro.