El cipayo mayor no quiso sacar los pies del plato y obedeciendo órdenes de sus verdaderos jefes, salió en redes a condenar la invasión de Rusia a Ucrania.
En un lenguaje impropio de su escaso y limitado léxico, el mamerto se despachó con un breve hilo de twitter para goce de sus seguidores.
Pero los usuarios, que saben lo burro y vago que es, no se la dejaron pasar y después de bardearlo a lo loco, lo incineraron sin piedad