El ministro de Economía fue ayer al Congreso a explicar los alcances del acuerdo entre el gobierno y el FMI.
Como no podía ser de otro modo, el macrismo dispuso a sus espadas para intentar boicotear la reunión apelando a chicanas e inexactitudes rayanas en la torpeza, la ignorancia y la falta absoluta de rigor.
En ese marco y luego de una tremenda burrada del diputado ultrmacrista Laspina, el mismo que fue a EEUU a hacer lobby para sabotear el acuerdo, Guzmán se le plantó con ese tono zen que lo caracteriza y le acomodó toda la dentadura