Con un fuerte contenido electoral y económico, la mesa nacional de Juntos por el Cambio se reunirá mañana en forma presencial por primera vez en el año. Según se anticipó, los ejes a debatir pasarán, sobre todo, por el ordenamiento en medio del caos desatado en distintas provincias producto de la inexistencia de las PASO como herramienta ordenadora.
El encuentro fue pautado para las doce del mediodía en el barrio de Palermo y, además de los puntos anotados en agenda, también tendrá otros agregados como el cara a cara entre la titular del PRO, Patricia Bullrich, y Horacio Rodríguez Larreta, confirmado por el propio jefe de Gobierno porteño.
Si Larreta estaba convencido, el año pasado, de que iba a ganar sin sobresaltos y que, como en 2021, lograría un acuerdo con Bullrich para bajarla de la carrera y quedar en soledad, ahora el escenario aparece más complejo. Con pocos recursos, la ex ministra de Seguridad logró posicionarse y no está en sus planes, por ahora, salir de ninguna contienda por la presidencial.
En tanto, la tensión en la sociedad UCR-PRO en una serie de distritos, que amaga con romper la alianza en seis provincias de cara a las elecciones para gobernador 2023, llevó a que los presidentes de los partidos que integran Juntos por el Cambio (JxC) resolvieran sancionar a los dirigentes de esa coalición que “incumplan” las reglas y busquen candidaturas por fuera o bien respaldar a otros frentes.
“En caso de incumplimiento de la resolución que establece el reglamento interno de la Mesa Nacional y las estrategias nacionales y provinciales de JxC, los dirigentes que no cumplieren con la estrategia serán sancionados y no podrán utilizar las siglas de JxC en alianzas, colectoras o lemas”, añadió la coalición en el documento.
Mientras, en el encuentro de mañana el tema central será el análisis la situación política de la alianza opositora en provincias con cronograma electoral anticipado. Allí ya se mostraron los primeros rompimientos, como en Neuquén y Río Negro.
Otra cuestión a debatir estará vinculada al contexto económico y político. Mauricio Macri ya mandó el mensaje de hablar de economía, puntualmente de la emisión de pesos y Leliq, para apuntar directamente contra Sergio Massa y “explicar” a la ciudadanía cuál es la “bomba” que dejará el Frente de Todos, y que obligará al ajuste brutal en un próximo gobierno.
Habrá un análisis de la situación económica, se alertará sobre el presente y las “graves consecuencias” en el mediano y largo plazo, también se abordará la situación institucional con su consiguiente división de poderes y una mención especial en materia de seguridad. Sobre lo institucional, claramente habrá un debate por el juicio político a la Corte Suprema. Esa discusión se dará el mismo día en que la Coalición Cívica tendrá una reunión con Carolina Gaillard, presidenta de la comisión, para intentar negociar algunos ejes de interés y acompañar (o no) el pedido de admisibilidad.
La seguridad también tendrá su debate, sobre todo después de la pelea pública con una ex bullrichista, actual larretista, por los muertos que dejó la ex ministra de Seguridad en operativos de desalojo. Esa discusión con Florencia Arietto se sumará a la propuesta de Patricia Bullrich de cambiar la legislación para poder recurrir al Ejército con la idea de hacer frente al narcotráfico en Rosario, por ejemplo. En la materia, en medio de rumores de no retorno y posibles reemplazos, la Ciudad se mostró activa para intentar el regreso del ministro Marcelo D’Alessandro post licencia, tras el escándalo generado por los chats.