Más allá de que cualquier descuento directo por sobre obligaciones de compra es un saldo a favor del consumidor, este tipo de instrumentos no ofrece soluciones reales para el poder de compra. Un estudio del Centro de Estudios por la Soberanía Popular Mariano Moreno analizó los patrones de compra en el AMBA y dio con que la mayoría realiza compras en negocios de cercanía y no en supermercados. Incluso en el marco de esta división surge una brecha de precios muy considerable en favor de las grandes superficies. La leche, los fideos y otros productos de la canasta básica son más baratos en los súpers.
💣 | FANTINO RE CALIENTE contra Farmacity y Coto por las promociones 2×1 le dio la razón a Toto Caputo:
— Agarra la Pala (@agarra_pala) March 16, 2024
“Me chupa un huevo si se enoja la community manager, quiero un producto A MITAD DE PRECIO, no me quiero llevar más 2 paquetes de yerba o la chota del gaucho alambre” 🔥 pic.twitter.com/YtR8Ahe2lh
Según la encuesta, el 62,38% de los encuestados realiza compras pequeñas y el 52% lo hace en negocios de cercanía. En la mayoría de las empresas productoras de alimentos, el promedio de aumento de sus productos es mayor en los comercios de cercanía que en los supermercados de cadena. El problema es que una proporción significativa de las adquisiciones de diversos alimentos se realiza en establecimientos minoristas de proximidad.
De acuerdo a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, los hipermercados y supermercados constituyen un mercado separado del resto de los formatos del comercio minorista. Esto se debe al patrón de compras de los consumidores finales entre los distintos formatos de venta y la relación entre los comercios y sus proveedores en la cadena de suministro.
A los precios de alimentos, en este marzo hay que sumar que llegan los aumentos en transporte, gas y luz. Y aquellas familias con chicos en edad escolar sufrieron aumentos de un 273% en la canasta escolar.