En una extensa entrevista en Infobae, Nancy Dupláa, hablo de su vida personal, de la relación con sus hijos, de su profesión y también de política. Aquí rescatamos esa parte:
—¿Te arrepentís de lo que dijiste de Francella?
—No. Es lo que pienso. Pero no era para ponerlo en debate: es mi opinión. Yo lo respeto, trabajé con él: fue un compañero espectacular, la pasamos bárbaro, nos cagamos de risa. Entonces, no fue desde ese lugar. Di mi opinión. Después, uno se sigue sorprendiendo con la réplica indiscriminada. Vos ponés mi comentario en la plataforma y dejás el hueso para que vayan todos: “¡Hija de puta, ladrona, chorra, pa pa pa!”. Siempre como el mismo relato, muy de manual: “¡Ahora vas a tener que ir a trabajar!”. Ese es el juego. ¿Lo puedo parar yo? No. ¿Lo quiero parar? No, ya está… Mátense. Qué sé yo.
—¿Hay algo bueno que le hayas encontrado a este gobierno? ¿Algo que que digas: “Esta estuvo bien”?
—No, no, no. Aunque no tengas mi ideología, esto es sanguinario, es un claro desguace para cierta clase social. Está claro, ¿no? ¿O lo tengo que explicar yo?
—Qué te pasa cuando se genera indignación a la gente con la cultura planteando: “son las películas o los chicos no comen”.
—Es un claro ejemplo de hacia dónde van. ¿Qué les pasa con la cultura? Que con la cultura empezás a aprender cosas, tu mirada de la vida se vuelve cuestionadora, empezás a tener consciencia. Eso es lo que te genera una película, una obra de teatro: crecer por dentro, tener crítica. Mirá, si hay algo bueno de este gobierno es que, de repente, nos unimos personalidades con tanta diferencia en nuestros pensamientos. Mirá Adrián (Suar) cómo salió. Y sabemos que Adrián no comulga con el peronismo, ni nada, y salió a bancar la parada.
—Ahora, ¿no acordás con repensar algunas cuestiones vinculadas al INCAA, Télam, a los medios públicos?
—Pero siempre se revée ahí, no más arriba. Nadie revée las corporaciones y esas cosas. No quiero ser extrema, pero para mí es el verdadero problema, no lo del INCAA. Está bien, hay que limpiar; ¿pero siempre tienen que limpiar lo de más abajo? ¿No hay posibilidad de que alguna vez alguien empiece a cuestionar… no sé, a los jueces, a cosas que siempre están de la mano de los gobiernos más conservadores? ¿Nadie vio cuando estuvieron reunidos en el sur? Bah, qué sé yo… no sé… Imaginate que si vos desfinanciás la UBA, está claro cuáles son tus objetivos. Es terrorífico, es una pesadilla. No sé quién puede defender esto. Sí, lo sabemos.
—¿Quién esperás que surja como referente de la oposición?
—Alguien con ganas, con capacidad de servicio, con amor.
—¿Alguien nuevo?
—El lema del peronismo es “Unidos y organizados”, y no estamos ni unidos ni organizados. Hay referentes que son muy muy buenos y que tienen mucha vocación de servicio.
—Los argentinos estamos cada vez más enojados entre nosotros.
—Pero claro, si todo lo que recibimos es agresión, violencia desde la imagen presidencial. (Milei) es extremadamente violento. Lo fue siendo candidato y lo es ahora. Violento desde lo verbal, desde cómo expone y desde lo que dice. Imaginate que de ahí para abajo estamos todos condenados a estar irritados, nerviosos, a estar locos, a querer matar al otro. Es un horror lo que está pasando, pero es un caldo de cultivo que ya viene en los medios. ¿Cuánto hace que no importa que alguien arme una operación periodística, con todo falso?
—¿Fuiste víctima de situaciones así?
—¿De operaciones? Sí, sí. Es cualquier cosa lo que dicen de mí. Que alguien pruebe que yo vivía del Estado, y que ahora tengo que trabajar porque no trabajé nunca. O que a mí me pasaba un sobre, que a la productora de mi marido la bancaba Cristina. Cualquier cosa. Pero bueno, no nos queda otra que aprender a llevarla. Lo dicen algunos conductores, en debates donde hay paneles. En las radios se dicen cosas así, como muy al pasar.
—¿Nunca cobraron nada de parte de Cristina?
—No, no. Nunca cobramos nada de parte de Cristina. No, no. Pero ya no me importa aclararlo. Ya está.