“Listo. No hay tiempo que perder. Algo tenemos que hacer”. Eso dijo Mauricio Macri hace un par de semanas, anticipando la necesidad de meter mano en el rumbo económico, y que se tradujo en los anuncios de ayer. Fue después de una las habituales partidas de póker del presidente con el financista Federico Braun, quien junto a los banqueros Gabriel Martino, Enrique Cristofani y el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, le venían aconsejando cambiar cuanto antes la actualización de las metas de inflación.
De esta manera, el Gobierno finalmente decidió tomar cartas en el asunto, y de ser una especie de “intocable”, empezó a disparar con munición gruesa contra el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger.
Según revela hoy Marcelo Bonelli en Clarín, la arremetida contra el titular del BCRA fue encabezada por Quintana, con quien coincidieron los ministros Nicolás Dujovne, Luis Caputo y Francisco Cabrera. ¿El disparador?: que el Gobierno, después de dos años, está demasiado lejos de mostrar resultados exitosos en la lucha contra la inflación.
En tiempos de la campaña electoral que lo llevó a la presidencia, Macri planteaba que sería muy sencillo bajar a un dígito los índices inflacionarios, algo que recién podría ocurrir en 2020, tal como quedó dicho ayer durante los anuncios del equipo económico.
Enterado de los cambios que se venían, Sturzenegger los rechazó terminantemente, con el argumento de que las nuevas metas le iban a quitar credibilidad al Banco Central y temía por el desgaste político de su figura.
El miércoles por la noche, en una larga reunión de directorio, sostuvo que “mantener las metas nos da credibilidad en los mercados”. Es más, llegó a decir que si se modificaban las metas, como finalmente ocurrió, todas las decisiones del BCRA se verían afectadas y eso ocasionaría más problemas que soluciones.
Según revela Bonelli, Macri dispuso que sea su jefe de Gabinete, Marcos Peña, el encargado de transmitirle la decisión política a Sturzenegger. Fue así que el titular del Banco Central pidió evaluar la inflación de diciembre y enero, pero la operación ya estaba en marcha, teniendo en cuenta que los pronósticos son malos para ambos meses.
Peña le dijo: “A partir de ahora las metas de inflación las fija el Poder Ejecutivo.” Una vez que el BCRA aceptó la directiva, ambos funcionarios acordaron hacer un anuncio conjunto para minimizar el daño en la imagen del Jefe de la autoridad monetaria. Y así se armó la conferencia conjunta de ayer, donde se lo vio tan incómodo a Sturzenegger.