Después del anuncio sobre los brutales tarifazos que se vienen, Mauricio Macri interrumpió por unos minutos su descanso en Villa La Angostura, para que él, sus ministros y secretarios tengan un fin de año más feliz: el presidente dispuso descongelar los salarios (de ellos) y autorizar un aumento del 25 %.
En Casa Rosada se venía evaluando desde hace varios días la posibilidad de volver a habilitar los aumentos para los sueldos de ministros, secretarios y subsecretarios, que llevan casi un año sin modificaciones, porque como un gesto de austeridad se había dispuesto el congelamiento de los haberes.
Por eso, en las últimas horas Macri rubricó la resolución que “saca del freezer” a los salarios de los funcionarios, incluido el del propio presidente. El jefe de Estado utilizó la firma electrónica, que le permite suscribir resoluciones mientras descansa con su familia en el country patagónico de Cumelén.
El aumento se equipararía con el incremento que tuvieron en este 2018 los trabajadores estatales (ATE y UPCN), que cerraron una paritaria del 25 % (20 % en enero y un 5 % en febrero), pero todavía tienen prevista una revisión en febrero que podría sumar algunos puntos más.
La decisión lo beneficiará al propio Macri y a unos 300 ministros, secretarios y subsecretarios que en enero recibirán un 20 % de aumento y en febrero un 5 %.
De esta forma, de acuerdo a datos que publica el Gobierno, el sueldo del presidente termina 2018 en unos $ 214.444, a los que desde enero se le aplicaría el aumento. A diciembre, en el caso de la vicepresidenta Gabriela Michetti, el sueldo asciende a $ 198.559.
En tanto, los ministros, perciben en promedio una suma de $ 183.500, con las excepciones del canciller Jorge Faurie, que cobra $ 350.000 como personal del Servicio Exterior de la Nación, y el titular de Defensa, Oscar Aguad que recibe un plus por desarraigo. Los sueldos de los secretarios rondan los $ 160.000.